El edificio del transformador fue denunciado por los vecinos de Ponte Vella en el año 1999 por ocupar una zona verde
07 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha ordenado ejecutar el derribo de la subestación eléctrica de Ponteareas que fue denunciada por los vecinos de San Roque en el año 1999 por ocupar terrenos de una zona verde. La instalación fue construida por Central Eléctrica Sestelo, que tiene en la misma zona otras instalaciones.
La comisión de gobierno de 6 de septiembre del año 1999 dio licencia a Sestelo para construir una planta eléctrica formada por semisótano y planta baja para sustituir a las tres casetas de electricidad existentes en el entorno.
Los vecinos recurrieron la licencia y el director xeral de Urbanismo dictaminó, en mayo del año 2001, que el edificio estaba construido en espacios de uso público por lo que instaba a reponer la legalidad urbanística en la zona.
Sin embargo, el gobierno municipal de Ponteareas recurrió la orden de derribo. El recurso fue iniciativa de José Castro que por entonces había dejado la alcaldía a su hija Nava mientras él se reservaba la área de Urbanismo. En el año 2006, la sala de lo contencioso administrativo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia desestimó las pretensiones del Concello y confirmó que «la obra se aparta ostensiblemente con un notable exceso de los términos en que fue aprobada la licencia». Ocho años después la empresa constructora de Regino Giráldez ejecuta el derribo. El letrado de los vecinos de Ponte Vella, Jorge Philippon, ha expresado su satisfacción.