Las anchoas incautadas en el puerto vigués alimentarán a 5.000 familias

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO

La mercancía decomisada está almacenada en las instalaciones de Frigoríficos Albeda.
La mercancía decomisada está almacenada en las instalaciones de Frigoríficos Albeda. a.m.< / span>

La cuarta parte ya se ha consumido en comedores sociales y un frigorífico ha congelado el resto para que el Banco de Alimentos lo distribuya sin prisa

05 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La partida de 21 toneladas de boquerón capturado ilegalmente que la Guardia Civil decomisó el miércoles en el puerto de Vigo servirá para alimentar a las familias más necesitadas. El producto ha sido donado al Banco de Alimentos de Vigo para que a su vez lo distribuya entre comedores sociales y colectivos de ayuda a personas sin recursos. El presidente de esta entidad, Pedro Pereira, estimó ayer que alrededor de 5.000 familias del área de Vigo podrán beneficiarse de esta partida, que es la más importante que ha decomisado la Guardia Civil durante los últimos años en el puerto de Vigo.

Una cuarta parte del pescado ya fue consumida en fresco ayer. Se sirvió en centros como el comedor social San Francisco o el de los Hermanos Misioneros Pobres de Teis. Este último a su vez distribuyó más de 30 cajas a otras entidades y congregaciones religiosas de la ciudad. Centros de beneficencia del resto de la provincia de Pontevedra y de A Coruña también han llenado sus despensas de pescado gracias a esta partida.

El resto de los boquerones permanece congelado en la nave de la empresa Frigoríficos Albeda, ubicada en O Berbés. Los responsables de esta entidad han ofrecido al Banco de Alimentos de forma completamente desinteresada la conservación de los pescados para que los pueda ir sacando a medida que lo vayan necesitando. Esta colaboración ha sido fundamental para no echar a perder el pescado, dado que el Banco de Alimentos carece de espacio suficiente en su nave de Sárdoma para poder conservarlos. Nunca antes habían recibido una partida tan grande de pescado, que aliviará las necesidades de alimentación de miles de vigueses que necesitan ayuda para poder subsistir.

Sin embargo, no parece que vayan a estar mucho tiempo dentro de estas instalaciones. Pedro Pereira, calcula que en tres o cuatro días habrán repartido toda la mercancía. El Banco de Alimentos trabaja con cerca de 200 asociaciones de toda la provincia de Pontevedra y cuenta con alrededor de 50.000 beneficiarios finales.

Mientras tanto, la Guardia Civil de Vigo prosigue con las investigaciones para detectar más barcos con pesca ilegal. La intervención del miércoles se produjo en el momento en el que las embarcaciones Nova Ameixa y Ferbera se disponían a efectuar la descarga de las 21 toneladas de boquerón que sumaban entre ambas. Agentes del Seprona, del equipo de policía judicial y la patrullera de la Guardia Civil del servicio marítimo con base en Marín participaron en esta operación contra la pesca ilegal que aún sigue abierta.

La labor de ayuda humanitaria que realiza el Banco de Alimentos de Vigo no sería posible si no fuera por el apoyo de empresas que prestan su logística para poder distribuir las donaciones de alimentos entre miles de familias de escasos recursos.

Tras la incautación de los 21.000 kilos de anchoa el pasado miércoles, esta entidad que preside Pedro Pereira, ha sumado una nueva compañía colaboradora. Frigoríficos Albeda ha ofrecido sus instalaciones en el puerto de Vigo para poder congelar y almacenar todo el pescado que, de otra forma, se hubiera echado a perder.

«Fresco dura muy poco tiempo, pero así lo podrán ir sacando poco a poco, a medida que lo vayan necesitando», comentaba a primera hora de la tarde de ayer Miriam Alonso, portavoz de esta empresa. En su opinión, es un orgullo poder colaborar de forma completamente gratuita en favor de tantas personas que no tienen medios para poder garantizar la cobertura de las necesidades más básicas en toda la provincia de Pontevedra.

«El Banco de Alimentos ya sabe que nos tiene aquí para lo que necesite; vamos a acondicionar bien todo este pescado para que pueda ser consumido con todas las garantías», añadió Miriam Alonso.

Pedro Pereira, por su parte, agradeció el apoyo de esta empresa frigorífica que hará posible que la mercancía llegue a quien más lo necesita.