En nueve meses se presentaron 1.834 demandas pero el ritmo ha bajado y solo llegan cuatro litigios nuevos cada día
01 jun 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El juzgado de refuerzo de las preferentes de Vigo ha registrado 1.834 demandas (incluidas conciliaciones) desde que se creó en septiembre del 2013, hace nueve meses. La media de entrada ha sido de 6,7 litigios al día. A finales del 2013, ya había alcanzado los mil casos y los otros 834 los ha ido acumulando a lo largo del presente año. Sin embargo, después de Semana Santa el número de se ralentizado y, a día de hoy, solo entran 20 casos nuevos por semana.
No obstante, la carga de trabajo que tiene este nuevo juzgado sobrepasa con creces lo que tramita un juzgado de primera instancia en todo un año. La carga normal en civil oscila entre 1.200 y 1.400 asuntos y el de preferentes tiene medio millar de asuntos más sin haber terminado el ejercicio. Esta sobrecarga ha llevado al decanato de Vigo a gestionar la petición de un segundo juez de refuerzo.
En Vigo y comarca, había unos 3.000 preferentistas de NCG que no estaban satisfechos con la quita del año pasado. A ellos, se suman vecinos de O Morrazo o incluso de Ourense que también reclaman la devolución de sus ahorros atrapados en productos híbridos. No solo eso, sino que clientes de otras entidades, como Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria, S.A. también tienen pleitos por las preferentes. Lo mismo ocurre con algunos compradores de valores Santander o SOS Cuétara, con sentencias a favor del cliente.
De las conciliaciones presentadas, el banco NCG ha rechazado la práctica totalidad, lo que ha llevado a los afectados a desistir o presentar una demanda, por lo que eso también ha añadido 200 litigios al tribunal.
El juzgado celebra juicios a un ritmo normal, de forma que los pleitos llegan en mayor proporción y se acumulan durante meses. Un caso que sea registrado hoy tardará varios meses en ser estudiado y tener una fecha para ser oídas las partes en sala.
El proceso de resolución ha avanzado ágil porque parte de los litigios se han cerrando con pactos antes de llegar a juicio. Eso se debe a que el banco NCG ha apostado por firmar acuerdos extrajudiciales con los afectados que hayan presentado una demanda y que tengan una alta probabilidad de ganarla.
En general, las últimas sentencias en Vigo admiten que el cliente que carecía de perfil de inversor no fue informado suficientemente por el banco del riesgo que corría al contratar ese producto y el juez anula el servicio.
El pacto previo al juicio es una forma de que, a cambio de una rebaja en la cuantía a devolver, ambas partes se ahorren las costas de los abogados y del proceso. Algunos aceptan pero otros prefieren obtener una sentencia que dicte la entera devolución de los ahorros, la anulación del contrato y los intereses exactos que tendrá que abonar el banco. En las de mayor cuantía, NCG recurre en la Audiencia, que cobra 800 euros en tasas. El conflicto parece estar llegando a su fin.