El Sergas justifica el cierre de camas en la caída de la ocupación

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

El Chuvi asegura que reabrirá plantas durante el verano si hacen falta

17 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El Servizo Galego de Saúde nunca ha cerrado tantas camas en Vigo como las que dejará inoperativas este verano. El máximo, entre mediados de julio y finales de agosto, serán 219 plazas menos, un 17,5 %. Y la media de los tres meses estivales será de 195 puestos de hospitalización menos. Pero en el Sergas cree que serán suficientes.

Según un portavoz, para llegar a esa cifra se ha hecho un estudio de la ocupación registrada en los últimos años. La dirección del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) asegura que los datos avalan la decisión. «El número de camas abiertas va a ser siempre mayor que la ocupación máxima registrada en los últimos años». En los períodos de mayor cierre de camas, los hospitales públicos de la ciudad contarán con 1.030 plazas de hospitalización. Según el razonamiento del Sergas, nunca, en ningún verano, han hecho falta tantas.

Por tanto, oficialmente, el organismo sanitario asegura que la medida tiene que ver con la baja ocupación que se registra en la temporada estival. La actividad quirúrgica es menor y caen también los ingresos médicos. El Sergas esgrime, asimismo, que el número de días que pasan los pacientes hospitalizados en Vigo ha caído en 0,45 por paciente. Como el volumen de ingresos es tan grande, tiene «una gran repercusión», según el Sergas.

Pero el gerente del Área Sanitaria, Mario González, explicó a los sindicatos el martes que también está relacionada con las restricciones presupuestarias. Por eso, las centrales hablan de recorte. Para empezar, no se pagarán tantas sustituciones por vacaciones. Al cerrar plantas como la séptima del Xeral (cirugía), el Sergas deja de contratar al personal de enfermería que las gestiona.

El Sergas asegura que, si hace falta, reabrirá las camas que sea necesario. En el 2012, tuvo que hacerlo. La detección de altos niveles de Aspergillus en la planta 7.2 del Meixoeiro obligó a trasladar a los pacientes a la 6.2, que permanecía cerrada por el parón estival.