El Centro de Atención a la Mujer prestó asistencia a 21 personas que tenían medidas de protección y alejamiento
25 mar 2014 . Actualizado a las 06:00 h.El Centro de Información a la Mujer de Cangas (CIM) prestó atención psicológica a 40 maltratadas durante 2013. De ellas, 21 estaban protegidas por órdenes judiciales que obligaban a sus exparejas a mantener una determinada distancia de alejamiento.
La atención a mujeres maltratadas es una de las principales tareas que efectuó el centro municipal a lo largo del pasado año, en el que atendió en total a 965 usuarias que plantearon 1.745 consultas. El centro va a más, puesto que en el año anterior resolvió 1.545 cuestiones planteadas por las canguesas. Esto indica un crecimiento del número de visitas del 12 %. Las gran mayoría solicita apoyo psicológico por diferentes problemas, encabezados por los relacionados con la violencia que fueron planteados por casi la mitad de las mujeres que solicitaron asesoramiento psicológico y, en segundo lugar, destaca la necesidad de obtener apoyo jurídico que supuso 380 consultas.
El grueso de las demandantes quieren saber cómo poder acceder a la justicia gratuita. Un 34 % de las mujeres que han acudido al CIM han preguntado si tienen derecho a que un abogado les asesore gratuitamente. Una cifra ligeramente inferior, un 32 % inquiere sobre temas relacionados con el derecho de familia, es decir separaciones, divorcios, pago de pensiones y problemas de esta índole familiar. El interés por cuestiones jurídicas ha crecido notablemente.
La mayoría de las que acuden al centro son mujeres de mediana edad, entre 36 y 45 años. Las muy jóvenes apenas van, ya que suelen recurrir a otros servicios municipales de juventud.
El perfil de la usuaria es de una mujer casada, en un 39 % de los casos. Las divorciadas suponen un 28 %. Dos tercios de las personas que acuden al centro solo tiene estudios primarios y solo un 8 % posee estudios superiores.
Como los problemas nunca vienen solos, el perfil de las mujeres que han requerido atención está formado abrumadoramente por desempleadas, que un 72 %. De ellas el 56 % perdieron su trabajo fuera de casa y el 17 % siempre han trabajado en el hogar. Las pensionistas suponen un 21 % de los casos atendidos.