El referéndum sobre el acuerdo con Eurofund arroja una pequeña ventaja al no
11 nov 2013 . Actualizado a las 14:17 h.Los opositores al proyecto de Porto Cabral han ganado por 47 votos de diferencia. Hubo 344 noes y 297 síes. El censo total era de 780 comuneros de los que participaron en los comicios 676. Los votos en blanco fueron 19 y nulos 16. La Policía Nacional desplegó desde primeras horas de la mañana un gran dispositivo de seguridad con motivo de las votaciones de la comunidad de montes de Cabral. Cinco furgonetas de antidisturbios velaron para que no ocurriesen incidentes como en ocasiones anteriores. La parroquia madrugó para votar y la jornada transcurrió con tranquilidad. Las urnas se abrieron a las diez de la mañana y estuvieron disponibles hasta las tres de la tarde.
Además de los agentes de la Policía Nacional, servicios de seguridad privada establecieron estrictos controles en las puertas del recinto, donde había que superar una doble barrera para acceder al lugar de las votaciones.
Desde primeras horas de la mañana se registraron grandes colas para votar. Aunque en la parroquia residen unas 8.000 personas solamente 780 son comuneros con derecho a voto. para poder expresar el sufragio hay que estar censado en uno de los cuatro barrios de la parroquia: Figueiras, Carballal, Sello y Becerreira.
La jornada transcurrió de manera apacible, solamente hubo quejas de algunas personas que llevaba el voto delegado de familiares. Fue el caso de un comunero que portaba la papeleta de su padre que tiene más de 90 años y está en silla de ruedas. Como no le dejaban introducir dos papeletas tuvo que llamar a otra persona de la familia para que depositase el voto del progenitor.
Los comuneros son titulares de 300 hectáreas de monte en mano común que no puede venderse. La única opción viable jurídicamente es la expropiación. El Ayuntamiento ha calificado los terrenos como comerciales y puede llevar a cabo la expropiación para luego otorgar en concesión adminisitrativa los terrenos de manera indefinida, según explicaron fuentes jurídicas que estuvieron vigilando que todo el proceso de la jornada electoral se ajustase estrictamente a la legalidad.