El certamen para jóvenes arquitectos cuenta con patrocinio del Concello
18 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La revista de arquitectura Future ha puesto en marcha por tercer año consecutivo un concurso internacional de ideas. El desafío planetario que propone a los nuevos valores del sector la publicación bilingüe que se distribuye por suscripción en tres continentes, es que los participantes desarrollen «visionarias propuestas urbanas para estimular las ciudades contemporáneas». Lo curioso de esta edición es que las propuestas elegidas están en Vigo y en la ciudad china de Harbin. Mientras que para esta localidad de Manchuria se buscan proyectos para un área residencial en decadencia de su casco histórico cercana a un río, el foco para Vigo se ha puesto en la igualmente decrépita panificadora.
Si algo le sobra a esta joya de la arquitectura industrial que se cae a pedazos sin que nadie haga nada por evitarlo, son ideas para su recuperación desde que la antigua fábrica de pan y harinas dejó de funcionar en 1980. El problema es que las iniciativas parten de grupos ciudadanos que poco más pueden hacer que llamar la atención sobre el tema. Sin embargo, ahora le llega una oportunidad de alcance mediático internacional.
Según se recuerda en las bases, el complejo de la panificadora es de propiedad privada y con un aprovechamiento urbanístico residencial y comercial definido. El concurso, sin embargo, se centra en proponer la reconversión de los edificios que hoy existen o la sustitución por otros nuevos permitiendo el uso residencial de vivienda social, para mayores, jóvenes, etcétera, También sugiere uso cultural, dotacional, terciario y comercial configurando espacios públicos que sirvan para hacer sostenibles y viable económicamente el proyecto.
Expectación en el COAG
La propuesta ha despertado tanta expectación entre los profesionales que hace dos días la delegación del Colegio de Arquitectos de Vigo (COAG), ante la premura de la convocatoria cuyo plazo finaliza el 15 de noviembre, celebró una reunión informativa con responsables de la organización del certamen.
El objetivo del concurso para menores de 35 años es ofrecer oportunidades para todos los estudiantes de arquitectura y arquitectos jóvenes de todo el mundo que de otro modo no tienen acceso a este tipo de retos aunque solo sean quimeras que nunca lleguen a hacerse realidad.
Los premios tampoco son especialmente suculentos: 3.500 euros el primero y 2.000 euros el segundo, además de dos menciones de 1.000 euros cada una, pero como recuerdan desde la organización, «arquitectos importantes han lanzado sus carreras debido a que sus proyectos fueron premiados como ganadores».
Patrocinio municipal
Entre los patrocinadores del certamen se encuentra el Concello de Vigo o la constructora San José, y entre los organismos colaboradores hay entidades chinas y españolas como la Fundación Consejo España China del Ministerio de Asuntos Exteriores, la Escuela Politécnica Superior de la Universidad CEU San Pablo de Madrid o la Escola Técnica Superior de Arquitectura de A Coruña.
Un jurado nacional (de China y España) examinará antes de 1 de diciembre todos los trabajos presentados en cada ciudad y seleccionará un máximo de 10 propuestas para cada emplazamiento. El 12 de diciembre el jurado internacional por España se reunirá en Vigo para elegir los ganadores, menciones y finalistas, entre la primera selección hecha por los jurados nacionales.