Representantes de más de un centenar de colectivos sociales, culturales y deportivos de la ciudad de Vigo recibieron ayer ayudas de la Diputación provincial que suman más de medio millón de euros, en un acto celebrado en el Museo do Mar de Galicia. El presidente provincial, Rafael Louzán, y el vicepresidente, José Manuel Figueroa, ejercieron de Reyes Magos, entregando las ayudas aprobadas, que es como entregar los cheques. O el dinero, en mano. Las preguntas son sencillas: ¿Con qué motivo se montan espectáculos de este tipo en el año 2013? ¿Acaso los señores Louzán y Figueroa han estirados sus respectivos bolsillos para realizar generosas acciones solidarias? ¿Alguien ha preguntado a los representantes de los colectivos convocados si querían formar parte del espectáculo?
Si el dinero es de todos y los políticos lo gestionan, ¿por qué se empeñan en figurar como si fuese el dinero de ellos? Además no parece demasiado elegante «obligar» a los colectivos que reciben esas ayudas a posar ante las cámaras de los medios de comunicación. Que lo hacen todos los partidos no me cabe la menor duda, por eso, debería estar regulado por la ley que las ayudas, subvenciones y demás colaboraciones económicas deberían realizarse con absoluta claridad pero muy alejadas de la autopropaganda, aunque se quiera disfrazar estos actos de homenajes.
Es decir, las administraciones públicas, que no olvidemos que están al servicio de los ciudadanos y no al revés, deberían asumir en estos casos aquella máxima cristiana que decía: «Que tu mano derecha no sepa lo que hace la izquierda». Algo que bien interpretado es como decir haced el bien y no lo proclaméis, ya sea por la derecha como por la izquierda.
jorge.lamas@lavoz.es
Los políticos están al servicio de los ciudadanos y no al revés