La marcha atrás se produjo tras pedírselo Figueroa al conselleiro
11 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Una conversación telefónica mantenida en la mañana de ayer entre el líder del PP vigués, José Manuel Figueroa, y el conselleiro de Educación, Jesús Vázquez, provocó la marcha atrás en la eliminación de la vigilancia privada en la ETEA que se iba a producir el próximo día 15. La medida había causado indignación en Teis y amenazaba con convertirse en un foco de conflicto permanente ante la falta de uso de los edificios del antiguo recinto militar.
La noticia de que seguirá la vigilancia privada fue anunciada por el PP vigués mediante un comunicado en la tarde de ayer. Según se explica en el escrito, «fruto de esta conversación surgió el compromiso de la Xunta de mantener el servicio de vigilancia en la ETEA».
El pasado jueves Figueroa ya había exteriorizado su recelo con su supresión, tras la cual inició gestiones privadas que han culminado con rapidez y con completo éxito antes de que se produjera. Tanto, que el PP asume las tesis vecinales al reconocer que el fin de la vigilancia pondría en riesgo los edificios de la ETEA «y después de todo lo que ha hecho la Xunta en la zona se podían producir desperfectos», explicó el máximo dirigente del PP vigués.
La supresión había sido criticada con dureza por el BNG, mientras Caballero se limitó a sugerir que podían generarse problemas. Pero buena prueba de las dudas que surgieron en la consellería es que en estos días fue imposible hablar de este asunto con la delegada de la Xunta en Vigo, María José Bravo, ni tampoco con los responsables de Educación. Era un tema espinoso y potencialmente polémico del que huían los cargos públicos del PP.
Tras conseguir que la consellería rectificara Figueroa ensalzó esta decisión. «Demuestra la sensibilidad que tienen el PP vigués y la Xunta por el proyecto para revitalizar el espacio público de la ETEA», aseguró.