La Agencia Espacial Europea da luz verde al nuevo satélite vigués

La Voz VIGO

VIGO

La delegación gallega ya ha regresado de Holanda, donde estuvieron dos semanas de pruebas con el HumSAT-D que se lanzará desde Rusia

03 abr 2013 . Actualizado a las 21:49 h.

La Agencia Espacial Europea ha dado el visto bueno al HumSAT-D, el nuevo satélite en el que trabaja la Universidad de Vigo. El equipo responsable del proyecto, con el profesor Fernando Aguado al frente, acaba de regresar de Holanda donde recibieron la luz verde.

Este nuevo satélite, que será lanzado en los próximos meses desde Rusia, tiene un peso de 850 gramos y viajará a una altura constante de cerca de 600 kilómetros. Su objetivo es ver la viabilidad del proyecto HumSAT, que incluye la puesta en marcha de una constelación más completa de satélites, sensores y estaciones de tierra.

Según apuntó el investigador el HumSAT-D respondió como se esperaba en las dos semanas de prueba en Holanda. El aparato tuvo que soportar cuatro ciclos de frió y de calor en la cámara de termo-vacío de el European Space Research and Technology Centree. Allí estuvo sometido a temperaturas que pasaban de 45 grados y otras de -20.

El satélite será puesto en órbita por el foguete Dnepr, que se lanzará entre finales de mayo y junio, aunque podría verse retrasada por factores externos. Los ingenieros vigueses están ahora a la espera de una fecha para ser ensablado en Roma en el UniSat5, un satélite de la Universidad de La Sapienza en el que compartirá viaje con otros dispositivos.

Esta no es la primera vez que la Universidad de Vigo se embarca en un proyecto de estas características, ya que ya hizo historia en el pasado con el lanzamiento del primer satélite gallego en el espacio, el XaTcobeo.

La futura constelación HumSAT

Una vez que el satélite vigués de buen resultado en el espacio será el momento de lanzar el resto de componentes de la constelación HumSAT, que incluirá sensores, estaciones terrestres y nueve satélites que se enviarán en, al menos, tres lanzamientos distintos. La idea es cubrir la mayor superficie de la Tierra posible durante el mayor tiempo posible.

Estos satélites son de comunicación de baja órbita y sirven para recoger datos de sensores de baja ponteica y coste en los que se puede, por ejemplo, recoger datos como la polución. Esta constelación tendrá dos años de vida útil.