La armadora vasca necesita renovar al menos dos buques en cuatro años
19 may 2012 . Actualizado a las 07:10 h.La prisa y, sobre todo, el precio, terminaron por frustrar las esperanzas que los gestores de Barreras habían puesto en la construcción de una pareja de atuneros para Albacora. Era su principal salvoconducto para salir del agujero en el que se encuentra. La armadora vasca necesita que, al menos el primero de dichos buques, esté pescando en el Índico en un plazo de año y medio. El segundo lo quiere operativo en dos años. Por eso la firma que preside Iñaki Latxaga, que ha cerrado un acuerdo con Armón, no estaba dispuesta a esperar el desenlace -de momento, sin fecha- del proceso concursal en el que está inmerso el astillero de Beiramar.
Por eso y, no menos importante, porque Armón le dio un precio -25 millones de euros- con el que Barreras asegura no poder competir porque perdería dinero.
Iñaki Latxaga no descarta colaboraciones futuras. Según explicó a La Voz, Albacora está inmersa en un proceso de renovación de la flota. «Tenemos previsto desguazar entre dos y cuatro atuneros en un plazo de cuatro o cinco años. Esa puede ser la oportunidad de Barreras», aseguró, aunque dejó claro que dicha oportunidad estará sujeta a los precios del mercado.
En el sector se baraja que si Armón ha podido ajustarlos tanto para quedarse con uno de los contados contratos que se firman, que se ha acogido a las ayudas que contempla la Administración para reflotar empresas. El astillero gijonés Juliana, que es donde se construirán los buques se encuentra en esa situación.
La plantilla de Barreras no se ha repuesto de la sorpresa que ha causado el cambio de planes de Albacora y culpan a la dirección del astillero de no hacer una contraoferta para no perder el contrato. «Si es por una cuestión de plazos, la capacidad que tiene Barreras permitiría construir el primer atunero no en 18 meses, sino en 12», explica un portavoz sindical.
También fuentes sindicales señalan que en una situación tan difícil como la que está viviendo la factoría se impone la creación de un gabinete de crisis. «Es el momento de que todos pongan de una vez las cartas sobre la mesa: dirección, acreedores, trabajadores y, por supuesto, Administración», sostienen.
Entre tanto, el presidente y administrador de Barreras, José García Costas, dice seguir trabajando para sacar al astillero del concurso de acreedores, e insiste en que la decisión de Albacora, «aunque no es una buena noticia, no es determinante en ese calendario».