Fomento eleva a 30.000 millones el coste del nuevo cinturón y la autopista Vigo-Tui

VIGO

LAS INFRAESTRUCTURAS DE FUTURO El Ministerio corrige ambos proyectos y asegura que las obras de construcción comenzarán a inicios de 2001 El Ministerio de Fomento ha corregido los proyectos de la circunvalación de Vigo y de prolongación de la autopista hasta la frontera portuguesa. Ambos estaban presupuestados en 10.000 millones cada uno, pero con las mejoras introducidas la inversión se disparará hasta los 15.000 en el caso de la A-9 y más de 14.000 en del segundo cinturón. Así lo ha comunicado el jefe de Demarcación de Carreteras del Estado, Pedro Sánchez Tamayo, en una visita a la ciudad. Las obras se iniciarán a comienzos de 2001. Este año se harán las expropiaciones y se fijará el trazado. La carretera que bordeará Vigo tendrá, además de cuatro carriles, vía lenta. Así mismo contará con dos enlaces directos hacia el Parque Tecnológico y Citroën.

24 may 2000 . Actualizado a las 07:00 h.

El jefe de Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia, Pedro Sánchez Tamayo, pasó por Vigo para participar en un debate del Club Financiero sobre las infraestructuras de futuro para la ciudad. «El encaje del trazado del segundo cinturón ha presentado muchas dificultades y se ha encarecido el proyecto, que estaba previsto que costara 10.000 millones y nos vamos a pasar de los 14.000», informó. Mucha pendiente Tamayo sostiene que es muy complicado llegar desde el mar hasta el alto de Puxeiros, con una pendiente de entre el 6 y el 7%: «Desde que se aprobó el trazado informativo han aparecido casas y hemos proyectado terraplenes y desmontes para falsos túneles». Casi todo el tramo, además de cuatro carriles, tendrá vía lenta. A mayores se dotará un enlace para comunicar el futuro Parque Tecnológico de Valadares y «es posible que Citroën pueda tener un acceso directo al mar y otro con el segundo cinturón y, por consiguiente, con la A-9». En cuanto a la prolongación de la A-9 hasta Portugal, es decir, el tramo Vigo-Tui, el Ministerio de Fomento tiene «casi concluido» el proyecto. Tamayo aseguró que el trazado ya está aprobado y que el proceso de expropiaciones se iniciará este mismo verano. También en este caso se ha disparado el presupuesto. El Gobierno fijó en algo menos de 10.000 millones la inversión inicial y ahora «rondará los 15.000 millones». El vial saldrá del intercambiador de O Rebullón, muy cerca de Puxeiros, y tendrá una longitud aproximada de 16 kilómetros. Con este tramo se posibilitará la circulación por autopista entre Lisboa y Ferrol, un viejo sueño que acumula varios años de retraso. El último tramo de la A-9 transcurrirá paralelo a la autovía O Porriño-Tui, muy próximo a los polígonos industriales de la zona y a la línea del ferrocarril. Para lo que aún no ha encontrado una solución el Ministerio de Fomento es la raqueta del nudo de Puxeiros, de forma que sea posible enlazar la A-52 y la A-9 sin dar el actual rodeo de un kilómetro.