Patrocinado por:

Tableta desde Helsinki: ¿Nokia Air o iPad con Android?

j. a. REDACCIÓN / LA VOZ

OCIO@

El Nokia N1 tiene una pantalla IPS de 7,9 pulgadas.
El Nokia N1 tiene una pantalla IPS de 7,9 pulgadas. LEHTIKUVA< / span> reuters< / span>

La compañía finlandesa «resucita» por sorpresa tras la venta de su división de teléfonos móviles a Microsoft

19 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

¿Nokia Air? ¿iPad con Android? Los tecnoadictos no saben muy bien cómo definir la nueva tableta presentada ayer por Nokia, el primer dispositivo para el mercado de consumo que lanza la compañía finlandesa tras la venta a Microsoft de su división de teléfonos móviles. El Nokia N1 es sospechosamente parecido a las tabletas de Apple, aunque algunos también lo comparan con un iPhone 6 Plus que ha pegado el estirón. Pero por dentro corre Lollipop, la última versión del sistema operativo de Google.

Con 7,9 pulgadas de pantalla IPS -formato 4:3, al igual que el iPad, aunque cada vez más fabricantes apuestan por él, en detrimento del panorámico- y carcasa de aluminio, el N1 recuerda poderosamente a los productos de Cupertino. Los bordes redondeados, la forma y disposición de los botones de control, las perforaciones en su parte inferior para los altavoces... todo contribuye a insuflar una sensación de déjà vu. En su interior cuenta con un procesador Intel Atom de de cuatro núcleos a 2,4 GHz, 2 GB de RAM y 32 GB de almacenamiento, que, como el iPad, no se pueden ampliar mediante tarjetas.

El Nokia N1 dispone de dos cámaras de 8 y 5 megapíxeles capaces de grabar vídeo a 1080p, e incorpora el nuevo conector USB reversible. Sus dimensiones (6,9 milímetros de grosor y 318 gramos) lo colocan por delante del nuevo iPad mini 3.

La tableta la fabricará Foxconn en China, pues Nokia ya no dispone de factoría en su sede central de Espoo, junto a Helsinki. El país asiático será el primero donde salga a la venta, en febrero del próximo año, a un precio de unos 250 dólares (unos 200 euros) más impuestos. Precisamente, el hecho de dejar pasar la jugosa campaña de Navidad y de empezar su vida comercial en el paraíso de los clones de Android hace pensar que Nokia, más que un pelotazo, busca reivindicar su marca, que no podrá usar en móviles hasta el 2016.