Una hora de trabajo para empezar

L. Balado

TORRE DE MARATHÓN

EDUARDO PEREZ

El nuevo Deportivo de Anquela se estrenó ayer en Abegondo en una sesión ligera y de reencuentros

15 jul 2019 . Actualizado a las 21:03 h.

La cita para la puesta en marcha del Deportivo 2019-2020 estaba fijada para las 18.30. Pero a esa hora lo único que saltó al césped de Abegondo fueron los aspersores que regaron el campo 1 de la ciudad deportiva del club, un césped en eterno mantenimiento y que, pese a los esfuerzos de los operarios, sigue con el mal aspecto con el que cerró el curso pasado.

Los primeros en salir del túnel fueron fabrilistas. Seis de los ocho citados para trabajar con el primer equipo en esta pretemporada. Con casi un cuarto de hora de retraso apareció el resto de la plantilla por el lateral de la grada al tiempo que Anquela saltaba en solitario desde el túnel de vestuarios para pisar por primera vez de corto el césped de su nueva casa.

Mosquera fue el último en incorporarse al grupo, que esperaba en el campo 2. Muchos abrazos y choques de manos por los reencuentros y por las presentaciones ya que, algunos jugadores de futuro dudoso -véase Juanfran o Diego Rolan-, ni siquiera conocían a la mayoría de sus compañeros. Hubo una breve charla, en la que Anquela no participó, antes de comenzar, a golpe de silbato, el trote suave en el tercero de los campos de Abegondo.

Carmelo del Pozo deambulaba por la grada, mezclado entre unos cincuenta aficionados que no se quisieron perder lo que acabó siendo una sesión breve y de poca chicha. El director deportivo estaba allí, pero su presencia fue más institucional que otra cosa. Apenas se desprendió de su teléfono móvil. Primero en la grada y luego en el campo, antes de acabar desapareciendo.

El verano se acabó. Se inauguró el trabajo con uno de los asistentes de Anquela afanándose en quitar las telarañas del puesto de grabación de vídeo. Bergantiños y Mosquera lideraban un grupo que acabó de trotar y se puso a las órdenes de uno de los ayudantes de Anquela para realizar ejercicios de coordinación con balón. El técnico jienense, apartado en casi todo momento de la acción, apenas abrió la boca.

Bóveda, Aketxe, Simón, Rolan, Fede Cartabia, Christian Santos, Vicente y Juanfran coincidieron más tarde en un rondo. El más próximo al público. Cinco de ellos nacieron en 1988, algo que no pasó desapercibido para Juanfran. «¿Del 88 también? La generación que va a devolver al Dépor a Primera», decía el lateral.Será el objetivo de un esbozo de Dépor que apenas lleva una hora de trabajo.