Ritmo, precisión en el pase y paciencia, las claves que el Fabril tiene que tener en cuenta mañana para superar al Cacereño en la fase de ascenso a Segunda B
27 may 2017 . Actualizado a las 16:17 h.El Fabril se juega mañana (12 horas, TVG 2) el ascenso a Segunda División B. Recibe en Riazor al Cacereño, con el único referente del partido de ida (0-0), en un campo en nefastas condiciones. Para tener éxito ante un rival veterano y presumiblemente replegado, el equipo de Cristóbal Parralo deberá darle amplitud al campo y velocidad al balón, tener paciencia y precisión en el pase, y marcar un ritmo alto.
«El Fabril debe aprovechar las dimensiones de un campo como Riazor para tener amplitud y para marcar un ritmo alto con balón. Y a partir de ahí, es importante no encajar y, sobretodo, no encajar primero. Es importante que el filial se sienta siempre cerca de la victoria para que no haya ansiedad», explica Óscar Gilsanz, entrenador del Racing Vilalbés.
Jacobo Montes, extécnico del Choco y del Alondras, coincide en el argumento y aguarda que al Dépor B no le pueda la presión del ambiente que se va a generar. «Vi el partido de ida y el campo estaba mal, no ayudaba. Si algo caracteriza al Fabril es tener una circulación muy fluida y allí no pudo. Ahora, el contexto es más favorable. Tiene que tener mucha paciencia porque el Cacereño encaja pocos goles y debe conseguir que el partido se le haga largo. La baja de Queijeiro, si se confirma [hoy pasará la última prueba], es muy importante porque se complementa a la perfección con Edu Expósito. El Deportivo B lleva mucho tiempo en Segunda B y espero que los chicos no se pongan nerviosos ante un Riazor con mucha gente, que eso siempre es una presión añadida», explica.
El exentrenador del Racing de Ferrol, Juan Veiga, coincide con que el Fabril debe hacer correr al rival y que debe evitar las virtudes del Cacereño. «Tiene que ser fiel a lo que ha hecho todo el año. Es muy combinativo, mueve mucho el balón, y la clave para atacar a equipos así, con una gran defensa, está en tener paciencia, mover mucho la pelota, con mucha precisión, moverlos de un lado a oro hasta encontrar esos espacios que seguramente van a aparecer porque Riazor es un campo grade. Hay que estar atentos al juego directo del Cacereño, a sus prolongaciones con caídas, y luego hacerlos correr mucho de un lado. Por lo demás, el filial debe intentar evitar acciones peligrosas de balón parado, cerca del área, como córneres o faltas laterales», resume.
Se espera una gran entrada en el estadio municipal de Riazor. El club ha anunciado que abrirá todo el anillo inferior del campo (Tribuna, Preferencia, Maratón y Pabellón).