El vídeo del gol, captado por las cámaras de la TVG, se extendió rápidamente por las redes sociales
17 mar 2017 . Actualizado a las 13:54 h.El guardameta colombiano René Higuita se metió de lleno en la videoteca histórica del fútbol, hace ya más de dos décadas, con una parada con los pies que fue bautizada como el escorpión. La acción, entre las más recordadas por los aficionados, la repetiría alguna vez más. Este miércoles, A Malata vivió en directo una acción similar con el Racing de Ferrol, aunque en este caso fue de un delantero y acabó entrando por la escuadra derecha de la portería. Joselu se quedó sin espacio por la banda izquierda, dio un pase atrás, Armental lo levantó desde el suelo -casi sin querer-, Bicho remató con la espuela izquierda y marcó de vaselina. «Como se me quedó el balón atrás, la única forma de rematar era esa e, intuitivamente, le pegué así como pude y tuve la suerte de meter el gol», cuenta Bicho, después de intentar repetir la secuencia para La Voz, aunque le costaba imitarla, porque no sabía exactamente cómo la había conseguido hacer.
El vídeo del gol, captado por las cámaras de la TVG, se extendió rápidamente por las redes sociales, donde incluso se dijo que Bicho era un aspirante a los Harlem Globetrotters, los malabaristas del baloncesto. El jugador de Sada asegura que no había otra forma de rematar ese balón: «Como el momento fue tan rápido y tenía que pensar en décimas de segundo, lo primero que pensé y que me salió fue hacer eso», relata. El tanto, en el minuto 50 de la segunda mitad, fue el 3-0 del Racing frente al Palencia, en un duelo que estaba pendiente tras la caída de parte de las cubiertas del estadio. El canterano del Deportivo había pasado toda la primera mitad en el banquillo, pero a los cinco minutos de saltar al césped sumó la que fue su cuarta diana de la temporada con la camiseta verde.
Bicho se atrevió a golpear de tacón cuando el equipo iba con un margen de dos goles, pero asegura que, por lo espontáneo de la acción, la hubiese ejecutado igual en cualquier momento: «Es que lo hice casi sin pensarlo, fue lo primero que se me pasó por la cabeza y creo que con cualquier resultado lo habría intentado. Otra cosa es que me hubiese salido». El lateral izquierdo Diego Maceira se echó las manos a la cabeza y, al igual que los otros compañeros, se acercaron a él para celebrarlo. Ninguno había visto nada igual en el campo y, seguramente por eso, se les notaba una pequeña sonrisa en la cara. Y es que además, él nunca había marcado de espuela. «Creo que una vez en alevines, pero esa casi ni cuenta», apunta el jugador, cuya versión del escorpión de Higuita quedará para siempre en la videoteca de A Malata.