José Manuel Sande, concejal de Deportes de la Marea, ataca con dureza al Deportivo

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

PACO RODRÍGUEZ

«Debe tratarse con respecto e desde a institucionalidade debida ao Concello e ao Goberno municipal», señaló el edil

10 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El gobierno de la Marea, a través de su concejal de Culturas, Deporte y Conocimiento, José Manuel Sande, atacó ayer con dureza al Deportivo al reclamar que «debe tratarse con respecto e desde a institucionalidade debida ao Concello e ao Goberno municipal», y acusó a la «dirección do Deportivo» de usar «un símbolo popular para volver a crear división».

Si el martes el presidente del Deportivo, Tino Fernández, aseguraba que el club ha invertido más de 3,5 millones de euros desde enero del 2014 en el mantenimiento del estadio de Riazor, ayer, Sande recordaba que el uso del estadio está tasado por el club en «700.000 euros anuais, sen que estes teñan repercusión algunha para o club, e sen prexuízo de outras axudas directas e indirectas que percibe do Concello», pero que no detalló. También recordó el edil que «o futbol base e o feminino no repercuten na cidade». Insistió en que el Concello «está a punto de licitar un contrato de mantemento do estadio», contrariamente a las declaraciones realizadas días atrás por el propio concejal de Deportes y el lunes por el alcalde de A Coruña, que aseguró en el programa Al rojo vivo de La Sexta que existía ya un contrato de mantenimiento de la instalación.

Sande advirtió de que cualquier posibilidad que se proponga desde el Deportivo «tiene que plantearse en términos que sean legales. Hay cosas que no son posibles, porque no parecen legales». También recordó que una subvención directa de una administración pública a una sociedad anónima deportiva «podría considerarse ayuda de Estado».

Tras conocer estas declaraciones, fuentes del Deportivo eludieron la confrontación con el Ayuntamiento, aunque recordaron que «las cubiertas son responsabilidad del Concello». El club recuerda que siempre ha ofrecido su colaboración, pero que la legalidad o ilegalidad de las propuestas solo es posible determinarla después de que ambas partes expresen con claridad sus posturas en una reunión formal.