El exfutbolista gallego relata su experiencia tras tres meses de trabajo en el Manchester City
13 dic 2016 . Actualizado a las 08:40 h.Después de tres años empapándose de fútbol en Barcelona, siguiendo entrenamientos de algunos de los mejores clubes de cantera de España, como el Barça, el Damm o el Espanyol, Francisco Javier González Pérez, Fran, está viviendo en Manchester su primera experiencia como entrenador. Allí acudió hace tres meses a la llamada de Txiki Begiristain y Pep Guardiola. La idea del directivo y del entrenador era que se enrolase en el fútbol base, al tiempo que coqueteaba con el primer equipo. Y allí se fue el de Carreira a adentrarse en la cuna del fútbol.
«La experiencia no podía estar siendo mejor. Estoy aprendiendo mucho, porque aquí se trabaja de una manera bastante diferente y superprofesionalizada. Solo tengo un problema: mi inglés. Aunque voy mejorando, me estoy encontrando con el hándicap de que el inglés de Manchester es bastante complicado de entender. Casi como si a alguien que está aprendiendo español le hablara un andaluz. Pero, bueno, poco a poco», expresa el seleccionador gallego.
En el City, Fran tiene una doble misión: aprender y enseñar. «Hago seguimiento de los equipos sub-15, sub-16 y sub-18. A partir de enero estaré más centrado con los mayores, aunque me encuentro tan a gusto con los pequeños. Por eso no quiero dejarlos y seguiré, al menos, un día a la semana yendo con ellos. Además, cada vez que tengo tiempo, asisto a los entrenamientos del primer equipo para ver un poco como trabajan e ir tomando notas para trasladar luego a la base. Lo que hago con los equipos de la academia es analizar un poco su forma de trabajo y aportar mi granito de arena con aquello que he visto en Barcelona, sobre todo. Sin renunciar a su filosofía, el City quiere trasladar algunas de las claves del éxito azulgrana a su cantera y ahí me encuentro yo», explica el técnico.
Uno de los aspectos que más ha sorprendido al ídolo deportivista en estos meses de trabajo con los citizens es la profesionalización y cuidado de la base: «Existe una gran planificación. Muchas reuniones. Todo está profesionalizado al máximo. Además, los equipos de chavales cuentan todos con su preparador físico, su fisio, su psicólogo... Hay equipos profesionales en España con menos medios que los canteranos de aquí», subraya.
Unos métodos que entiende que podrían ser perfectamente aplicables en España, incluso los entrenamientos matinales con los niños. «Existen acuerdos con escuelas para que el horario lectivo se adapte. Aquí tienen entrenamiento matinal un par de días por semana. Entonces, los colegios en los que estudian esos niños les dan clases complementarias. Por encima, en la academia (ciudad deportiva del fútbol base) hay profesores de apoyo para que hagan tareas y den clase. Para que los niños, por buenos que sean, sigan en el City, tienen que cumplir unos requisitos académicos anuales», enfatiza.
Otro requisito para poder triunfar en la academia del City es disponer de un buen físico. «Aunque están apostando por otro fútbol, siempre sin perder su identidad, se sigue dándole mucha importancia a la preparación física. Además de los juegos de posesión y el trabajo técnico-táctico, se incide mucho en eso», comenta.
Entrenamientos diarios con la base, horas de vídeo y observación del trabajo de Guardiola
La jornada de Fran en Manchester comienza temprano. A las siete y media suena el despertador y una hora después está ya en las instalaciones del City.
Allí acude a las primeras reuniones antes de los entrenamientos diarios. Si el trabajo con la base se lo permite, completa su jornada con la asistencia a los entrenamientos del primer equipo como observador. Fue el propio Guardiola el que lo invitó. «Al llegar aquí me dijo que, siempre que pudiera, acudiera a verlos entrenar. Para mí es un honor poder verlo trabajar, porque se aprende un montón», explica con humildad el que fuera capitán del Dépor.
Tras completar la mañana, toca comida, en la propia academia citizen. Por la tarde, horas y horas de inglés -«ahora he cogido un profesor con el que, depende del día, doy entre dos y cuatro horas», explica- y más fútbol. «Nunca tanto vi. Me voy para casa y a todas horas echan algún partido de Premier, internacionales...». Fútbol por televisión además de acompañar cada semana a los equipos sub-16 y sub-18. «Con estos hago los desplazamientos y a los más pequeños procuro verlos siempre que puedo en casa. Vamos, que no me aburro», sonríe.
Así transcurre la vida inglesa de un Fran que solo ve alterada su tranquilidad cuando desde España llega el enésimo rumor sobre el fichaje de su hijo Nico por el City. «No hay nada. Para empezar, no sería legal, porque tiene 14 años y hasta los 16 no podría. El crío hará lo que él quiera, como cuando se fue a Barcelona. Lo único que me preocupa de esta situación es que no le hagan pagar al chaval mi fichaje por el City».