Sidnei se quedó en Barcelona tras sufrir una contusión en el tórax y Laure fue expulsado
16 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Sabido era que tras el parón liguero, al Dépor se le presentaba un calendario complicado en las tres jornadas siguientes. Barcelona, Celta y Valencia esperaban a los coruñeses, que habían encontrado en el último minuto frente al Sporting un flotador con el que evitar el posible hundimiento. Sin embargo, pocos contaban con que el duelo del Camp Nou dejara al equipo tan tocado antes de disputar el derbi.
Más allá del resultado, el Dépor sale muy dañado de su visita al templo azulgrana debido a que lo hace con un lesionado, un expulsado y una defensa que encajó cuatro goles que pudieron ser el doble. El estado físico de Sidnei es, en estos momentos, la mayor preocupación en el conjunto coruñés. El central recibió un duro golpe en el pecho mediada la primera parte, antes de que el Dépor encajara su primer gol. Y aguantó hasta que Rafinha puso el 1-0. Tras una primera exploración, el club informó de que sufre «una contusión en el hemotórax izquierdo, pendiente de pruebas médicas complementarias».
El mismo diagnóstico se dio la pasada temporada cuando el portero del Celta Rubén recibió un golpe involuntario de Vietto. Tras unos días de descanso, el meta jugó la siguiente semana contra el Sevilla y realizó un gran partido.
Aunque ayer sufriera un dolor tan fuerte como para tener que retirarse del campo, si no existe rotura o fisura, podría no haber problema para que Sidnei actúe el domingo en Balaídos. Pero también hay que tener en cuenta que los golpes en esa zona, incluso sin alteraciones visuales, pueden generar mucha incomodidad, por lo que es posible que durante toda la semana sea duda y que incluso pueda no estar en condiciones ni de entrenarse. De momento, ayer se quedó en Barcelona por precaución en compañía del doctor Barral.
Pero si hay una mínima posibilidad de que juegue lo hará. Porque la diferencia entre el brasileño y Arribas es enorme. Aunque los minutos que ha tenido esta temporada cumplió, el madrileño está a años luz de Sidnei y no contar con este en Balaídos haría afrontar el duelo en desventaja. Una pérdida segura de cara al próximo duelo es Laure. Cierto que está previsto que Juanfran, ausente en el Camp Nou, esté en condiciones de actuar contra el Celta, pero no está garantizado su concurso, por lo que esta semana, a diferencia de la pasada, sí que tendría que verse en la tesitura de forzar su recuperación ante la ausencia de laterales derechos.
Y a estos problemas individuales hay que sumar el varapalo que supone perder un partido en el que, aunque el Dépor dio la cara durante algo más de veinte minutos, las ocasiones azulgrana llegaron a ser tan claras, que incluso la renta al final pareció escasa. Además, el equipo sigue sin marcar como visitante. En lo que va de temporada todavía no ha estrenado su casillero de goles lejos del estadio municipal de Riazor. Las jornadas van pasando, la ansiedad puede ir en aumento y este segundo partido consecutivo alejado de A Coruña no llega en el mejor momento. Más, si los males se juntan.