Brilla en defensa, pero se destaca como el que menos ataques genera de toda la Liga
21 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Hay un Dépor de dos caras, el que defiende con uñas y dientes su propia portería, y el que aún busca la brújula para hallar la del rival. Las cuatro primeras jornadas esbozan un equipo fundado sobre el pilar defensivo, pero con la columna atacante aún pendiente de fraguar. Como el éxito pasa por competir en las dos facetas, todo depende ahora de cuánto tarde Garitano en plasmar el buen funcionamiento ofensivo. La quimera de concluir todos los partidos con 0-0 y sumar punto a punto no existe. Por lo que se está viendo, este Deportivo está inmerso en la misma tarea que los clubes con los que luchará por la permanencia, así que ajustar el engranaje de mediocampo hacia delante y dar con la tecla que libere y responsabilice (al mismo tiempo, he aquí la dificultad) a los atacantes se revela vital para que la casa se sostenga y el proyecto salga adelante. La fase de adaptación en que aún se encuentran muchos de los fichajes contrasta con el conocimiento y sobriedad de que presume el bloque defensivo. Al paso del Eibar y del Athletic por Riazor, le seguirá mañana (20.00 horas, beIN LaLiga) un Leganés cortado por el patrón de un técnico fraguado en el fútbol norteño. Es el segundo recién ascendido consecutivo al que se enfrentarán los coruñeses en pos de la segunda victoria.
A balón parado
Tres partidos después de su marcha (ya no jugó contra el Betis, el Athletic, ni el Alavés), Lucas Pérez sigue encabezando buena parte de las estadísticas ofensivas de su antiguo equipo gracias al único partido que jugó, contra el Eibar en la primera jornada. Es sintomático que haya marcado uno de los dos goles blanquiazules y haya dado la única asistencia (lanzó al segundo palo la falta que Mosquera empujó a la red), pero quizá aún diga más que también marque el ritmo en remates por partido (3).
Las acciones a balón parado respaldan el peligro que genera este Dépor. Aún no ha marcado de jugada y sus dos únicos tantos proceden de una falta y de un penalti. Andone, la nueva referencia ofensiva, se destaca junto al valencianista Nani como los que más rematan de la Liga sin gol. El rumano, con más de 300 minutos de juego, disparó 2,5 veces por partido, mientras el portugués, que jugó tres jornadas completas, chutó 3,3 por encuentro.
Con menos ataques de la Liga
Como equipo, el Dépor es el tercero con más acciones defensivas (a rebufo del Atlético y el Alavés), mientras se revela como el octavo con más media de posesión (solo por detrás del Barça y el Madrid, el Sevilla, el Valencia, el Atlético, el Betis y Las Palmas), pero es el que menos ataques genera de toda la Liga. Quizá se afane tanto en mantener el orden defensivo, que en ocasiones hasta parezca algo contemplativo, como si simplemente esperase el fallo del adversario.
Si resulta muy difícil llenar el vacío atacante dejado por la marcha de un futbolista de 20 millones de euros, el trabajo defensivo sí que se reveló eficaz frente al Alavés para hacer olvidar que Sidnei tampoco se encontraba sobre el campo. La ausencia del brasileño se había revelado fatal en las cinco jornadas que se había perdido la temporada pasada: cuatro derrotas y un empate. En cambio, en Mendizorroza la labor del incansable Fayçal (corrió 12,24 kilómetros) y la omnipresencia de Arribas (6 despejes y 5 recuperaciones) se destacaron en una fenomenal actuación coral de todo el equipo. Dejó al adversario (que había marcado un gol en el Calderón y dos en el Camp Nou) en solo nueve disparos (una de las menores cifras de toda la jornada) y ninguno entre los tres palos.
Conocimiento
El esqueleto defensivo del Dépor procede de la pasada campaña. Llevan muchos partidos jugando juntos y eso se nota en cuanto a conocimiento y compenetración. Más allá de las contingencias de la lesiones (y a la espera de comprobar en qué queda la apuesta por Luisinho ahora que Navarro se ha recuperado), el único cambio significativo de titulares en las alineaciones de estas cuatro primeras jornadas se produjo en el eje del equipo, donde Borges, otro de los que ya estaban, ocupó el puesto que de inicio el novel Guilherme le había arrebatado. Con Lux de nuevo bajo palos, entre los seis jugadores de campo llamados a un protagonismo especial en esta faceta destructiva solo Albentosa se revela nuevo. Pero el exjugador del Eibar y del Málaga no ha tardado ni un minuto en poner de manifiesto su jerarquía dentro del campo y también en el vestuario.
A la espera de que Çolak, Carles Gil, o Marlos muestren las virtudes que les abrieron las puertas de la Liga, este Dépor aún marcha a dos velocidades.