Víctor recupera el 4-4-2 y jugadas olvidadas para que el Dépor se reencuentre con el triunfo
20 mar 2016 . Actualizado a las 18:46 h.Vicandi Garrido pitó el final de la primera parte, pero había jugadores a los que parecía que se les había hecho corta. Tal era lo enchufados que estaban los blanquiazules en el duelo, que camino del vestuario prosiguieron su particular partido. Lucas intercambiando impresiones con Navarro, Lux con Fayçal... Corrigiendo errores, puliendo algunos aspectos a solventar... El Dépor volvió a estar concentrado en una jornada en la que todo fue un regreso a las buenas formas. No tanto en el juego, sino en la concentración, en la ambición final y en la fortuna que durante semanas había abandonado a este equipo.
Doble pivote con un Celso Borges muy activo
Tal y como estaba previsto, Víctor apostó por recuperar el doble pivote, sacrificando a Álex Bergantiños. Aun cuando la aportación del de la Sagrada Familia durante toda la temporada ha sido extraordinaria, con el costarricenses el equipo pareció tener un plus ofensivo.
El equipo logró amplitud en las bandas con un 4-4-2 en el que los interiores se metían bastante al medio y dejaban las bandas libres para las continuas subidas, sobre todo en la primera parte, de Juanfran y Luisinho.
Cartabia salió para aportar descaro en el uno contra uno
Si en la primera parte el Dépor trató de conseguir superioridad numérica con la subida de los laterales y los interiores muy metidos al medio, tras el gol levantinista, Víctor apostó por el descaro de Fede Cartabia. El argentino es, hoy en día, el único jugador blanquiazul que consigue marcar la diferencia pegado a la línea de cal. Cierto que su atrevimiento le cuesta a veces al equipo pérdidas de balón, pero no menos lo es que en el uno contra uno añade una variante. Tiene regate, velocidad y disparo cuando lo precisa. Ayer le volvió a dar otra dinámica al equipo. Y obtuvo su recompensa poniendo el centro que, a la postre, significaría la victoria del Dépor.
Mucho centro, poco rematador
Una situación curiosa en el 4-4-2 dispuesto ayer por Víctor hasta la salida de Oriol Riera (minuto 83) es que ninguno de los dos referentes del ataque es un delantero centro nato. Ambos pueden actuar en esa posición y, de hecho, son muchos los partidos en los que han exhibido una compenetración perfecta, pero falta un referente si, como hizo ayer el equipo en la primera mitad, abusa del centro al área. Fueron numerosos los que llegaron, pero escasos los que acabaron en remate certero.
Un único lanzador de córner y otra vez tres palomeros
Puestos a dar una vuelta al pasado, con la inclusión del doble pivote y el 4-4-2, Víctor también apostó por esta regresión en las jugadas de estrategia. Después de muchas críticas y memes incluidos por la utilización de dos futbolistas para lanzar los córneres en largo, ayer volvió a usar solo un jugador. La anécdota estuvo en la reacción del público cuando Lucas, que había ido hasta la esquina para acompañar a Fayçal, abandonó esa zona y el público brindó una gran ovación. La otra recuperación fue la de los tres palomeros para los córneres en contra.
La plantilla, citada el lunes en Abegondo para empezar a preparar el derbi
El próximo partido del Deportivo llevará al conjunto coruñés a Balaídos para disputar el derbi el sábado 2 de abril a las 22.05 horas. Aunque la próxima semana no habrá partidos de liga debido al parón para disputar encuentros de selecciones nacionales, la plantilla blanquiazul solo tendrá un día de descanso antes de empezar a preparar el duelo con el Celta. Los jugadores están citados mañana a las 10.30 para un entrenamiento en el que Víctor Sánchez no podrá contar con los futbolistas convocados para compromisos internacionales (es el caso de Borges y Fayçal Fajr, citados por Costa Rica y Marruecos, respectivamente). De cara a la trascendental cita frente al equipo celeste, el Dépor espera recuperar a alguno de sus lesionados.