Un central siempre por delante

Pedro José Barreiros Pereira
pedro barreiros A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

Como canterano siempre jugó más avanzado que su edad hasta coronar su escalada a la élite

06 ene 2016 . Actualizado a las 09:12 h.

La Copa permite disfrutar de la última perla de esa fábrica de centrales del Deportivo. El fabrilista Róber, debutante en los dos partidos de la pasada eliminatoria contra el Llagostera y de nuevo entre los elegidos para el partido de esta tarde (16.00 horas, digitales) frente al Mirandés, toma el relevo de Insua, Uxío, Rochela o Piscu para derribar la puerta del primer equipo y hasta reclamar un puesto por derecho propio. No hay límites para este joven futbolista (Oleiros, 1995), acostumbrado a superar etapas por adelantado, a avanzar sin límites en su progresión, desde que era un cadete recién llegado a la base del club procedente del Victoria y dio el salto al juvenil de División de Honor, o como cuando en su segundo año de juvenil se estrenó con el Fabril. Esta pretemporada, después de un último curso destacado en el filial, actuó con el primer equipo y hasta concluyó los tres primeros amistosos con dos goles en su cuenta.

Fueron la tarjeta de presentación de un central de salida fácil de balón, tranquilo, seguro y elegante, pero también contundente. «Siempre decía Manuel [el entrenador del Fabril] que menos mal que nos pasábamos todo el día juntos y somos muy amigos, porque en los entrenamientos siempre nos picábamos y hasta teníamos algún roce», recuerda su excompañero Dani Iglesias, ahora cedido por el Alavés en el Guadalajara de Segunda B. «Es un fenómeno como persona, como jugador es un espectáculo y para mí reúne todas las condiciones para ser central titular del Deportivo», añadió. A sus buenas condiciones técnicas añade un físico adecuado para su posición (mide 1,82) y madurez para asumir todos los retos. Incluso cuando, ya consolidado en el Fabril, regresó al final de la temporada 13-14 al juvenil para actuar de mediocentro en un partido contra el Celta en Abegondo. Y arrasó.

Cuarto central

Desde luego, Víctor no se echa a temblar cuando piensa en Róber como cuarto central de la primera plantilla (así ha actuado por la lesión de Lopo, o incluso para dar descanso a alguno de los titulares en la Liga, como ahora a Arribas). Es más, cuentan que quedó encantado de su rendimiento durante el verano y también en estos partidos, cuando el fabrilista conjuntó sus buenas cualidades técnicas para jugar desde atrás con la máxima atención en el juego y la ausencia de despistes. «Es que a veces engaña, porque juega pausado y con calma, pero no es que sea lento», remarca Iglesias. Róber, que acaba de empezar la carrera de Psicología por la UNED, se agarra a sus cualidades para dar un nuevo salto en su carrera. Esta vez el definitivo hacia la élite.