El Lugo supera con claridad a un Dépor áspero al que todavía le falta kilómetros para acoplarse
26 jul 2015 . Actualizado a las 09:08 h.Pocas conclusiones suelen liberar los partidos de preparación, los bolos veraniegos. Pero si alguna se puede extraer del de ayer es que al Lugo le falta completar los deberes lógicos del rodaje estival y que el Dépor está todavía sin coser.
Porque a los blanquiazules les costó un mundo desperezarse en Ribadeo. Más cuajado, con una idea similar a la que moldeó Quique Setién, el Lugo de Luis Milla se adueñó del Emma Cuervo en el arranque. Cimentó su dominio en la línea de cuatro que se desplegó por delante de Pita, con Sergio Marcos y David Ferreiro como catalizadores. La superioridad numérica que generaron los cinco hombres desactivó a Juan Domínguez y Medunjanin, que no encontraron una zona cómoda por la que empezar a domar el balón. El Dépor se estiraba en arreones, pero cuando lo hacía, al menos creaba peligro. De un melonazo que bajó Oriol, Dani Iglesias -que se retiraría con un esguince de tobillo- a punto estuvo de fabricar un gol.
Pero eran solo chispazos esporádicos que poco tenían que ver con la elaboración. Y con estos ingredientes resultaba complicado que el Lugo no terminase marcando. Justo cuando los de Víctor Sánchez habían dado un paso al frente, habían adelantado la línea de presión para evitar que su rival confeccionase fútbol sin estrés, un contragolpe acabó en los pies de Ferreiro -el extremo fue una pesadilla para Róber- quien con la izquierda puso la pelota en el corazón del área. Sin dejarla caer y de espaldas, Caballero, ese delantero con planta de Urzaiz, demostró que vive un idilio con el gol en este principio de temporada. Su remate a ciegas se coló cerca de la escuadra izquierda de Lux. Nada pudo hacer el portero.
-¡Víctor, que espabilen!
Era demasiado tarde. Ya habían regresado al vestuario.
El Dépor que regresó de la caseta fue otro. Con poco acierto y demasiados errores, pero, por lo menos, intenso. La entrada de Álex Bergantiños en la medular le sirvió para ganar equilibrio y Laure echó el cerrojo al pasillo por el que se había colado Ferreiro como un puñal. La polivalencia de Juanfran también aportó soluciones ofensivas antes de asistir al carrusel de cambios típico de un choque de pretemporada. Entre las sustituciones, resaltó la de Caballero por la sonora ovación que recibió. Recompensa merecida a su entrega.
Lugo: José Juan; De Coz, Puerto, Carlos, Manu; Seone; Iriome, Pita, Sergio Marcos, David Ferreiro; y Pablo Caballero. -También jugaron- Roberto Fernández, Campillo, Igor Martínez, Dani Pedrosa, David López, Lemos y Abel Molinero.
Deportivo: Lux; Rober, Lopo, Insua, Saúl; Juan Domínguez, Medunjanin; Corredera, Luis Alberto; Dani Iglesias y Oriol Riera. -También jugaron- Luis Fernández, Óscar, Álex Bergantiños, Laure, Juanfran, Fabricio, Teles, Luisinho, Navarro y Arribas.
Gol: 1-0, min 38: Pablo Caballero.
Árbitro: José Luis Corral García. Sin Amonestaciones.
Incidencias: Partido disputado en el estadio Pepe Barrera de Ribadeo y que servía para decidir el campeón del trofeo Emma Cuervo. Lleno, con gente incluso en la zona donde no hay localidades.