A petición de Víctor, Pandiani charló de forma individual con varios deportivistas antes del decisivo partido de la última jornada en el Camp Nou
01 jul 2015 . Actualizado a las 21:27 h.Pandiani marcó su último gol con el Dépor diez años después de su despedida. En la batalla final por la Liga, cuando el equipo de su corazón disputaba los noventa minutos decisivos para mantenerse en Primera, Víctor llamó al Rifle. «Habló conmigo para que fuera a dar una charla en cuanto pudiera a hablar con los chicos ahí, porque estaban anímicamente bastante de bajón. Yo he vivido muchísimas situaciones como las que estaba pasando el Deportivo en esos momentos, pero yo también estaba de entrenador en Barcelona [en el Club Deportivo Masnou], llevaba dos equipos y tenía bastante complicación para ir, pero ese último partido que el Deportivo jugó en Barcelona me presenté en el hotel», recuerda.
El uruguayo, que en abril pasado cumplió 39 años y sigue jugando en la Segunda División suiza, aunque dispone del carné de entrenador, está ligado a algunos de los mejores recuerdos del deportivismo. De blanquiazul ganó la Copa del centenariazo y dos Supercopas, pero en el plano individual se le recuerda especialmente por goles antológicos, como los que marcó al París Saint Germain (4-3), al Manchester United (2-1) y al Milan (4-0), o el que dio el triunfo al Dépor en Turín frente al Juventus (0-1).
Y, de nuevo, El Rifle acudió a la cita. «Yo no era ninguna arma secreta -comenta entre risas-. El arma secreta para quedarse en Primera era el propio Víctor. Sí que es verdad que mucha gente que me vio aquel día se puso contenta, me dio mucha motivación en ese momento, pero Víctor fue el gran artífice de todo», insiste antes de recalcar que aquel 2-2 final en el Camp Nou no le corresponde a él. «Yo solo estuve hablando con Víctor y con los chicos. Estuve en el hotel con los muchachos y al final se sacó un resultado que sirvió para que el equipo se quedase en Primera. La verdad es que me fui muy contento para casa al final», subraya.
Aunque asegura que no participó en la habitual última charla antes de partir hacia el estadio, Pandiani reconoce que se entrevistó con varios futbolistas del Dépor de forma individual. «Hablé con dos o tres antes del vídeo y con el cuerpo técnico también. Estuvimos un ratito conversando y estoy contento por ese momento que tuve con ellos, porque salió el resultado que se necesitaba para quedarse», explica.
Aquella permanencia servirá, según destaca el exdeportivista, para que Víctor demuestre en el banquillo de Riazor su valía. «Le deseo una temporada excelente, porque se lo merece, porque tiene ganas y porque dispone de un cuerpo técnico formidable. Y siendo Víctor uno de los pilares del Superdépor y de los momentos espectaculares que se vivieron en aquellas temporadas la afición estaba volcada con él y es un punto importantísimo para que todos vayan de la mano. Le deseo lo mejor», añade.
«El Deportivo volverá a ser poseedor del balón»
Compañero de Víctor en aquel Dépor que entre el 2000 y el 2005 acumulaba participaciones consecutivas en la Champions y se quedó a un paso de jugar la final, Pandiani fichó este verano por el Lausanne Sport, que milita en la Segunda División suiza. «Estoy con la ilusión de un pibe. Como si fuera el primer día, no pierdo las ganas de entrenar y jugar. Aún tengo ese gusanillo cuando empiezo a prepararme antes de un partido y mientras eso no se pierda y el físico te lo permita, claro, y habiendo posibilidades y expectativas muy lindas para tener opciones de subir a Primera... Además, el entrenador es Celestini, que fuera jugador en España del Getafe y del Levante. Me llamó y contaba conmigo para aportar mi granito de arena para enseñar a los jóvenes, que hay muchos en el equipo, y hacerles saber cuál es la realidad de un profesional», explica.
Desde Suiza sigue la actualidad deportivista y avala los fichajes de Navarro, Arribas y Riera: «Es importante tener jugadores de experiencia, para competir, prepararte y convivir con el compañero el día a día. La gente con experiencia genera un plus a la gente joven siempre y cuando estén concienciados de cumplir ese rol. Cuando los trajo Víctor es porque van a brindar muchas más cosas que lo que van a brindar dentro del campo, sino también fuera y en el día a día del vestuario, aspectos que son fundamentales también. Así que esperemos que se pueda conformar el equipo que él quiere y que el Deportivo pueda completar una temporada tranquila», desea.
En su opinión, Víctor podrá ahora poner su propio sello en el Dépor. «Llegó en una situación complicada, logró el objetivo que todo el deportivismo quería, y ahora llega una etapa nueva. También es bueno poder coger de nuevo al equipo en esta circunstancia, tener una pretemporada, poder conformar un equipo más o menos a tu gusto y que empiece una dinámica que es la que quieres y que los chicos se conciencien de cómo hay que plasmar una identidad de juego», afirma y augura un equipo y un estilo de juego nuevos. «Víctor va a darle un cambio muy grande a lo que era el Deportivo la temporada pasada. Es un entrenador moderno, que quiere jugar al fútbol. Seguramente el Deportivo volverá un poco a dar el compás del encuentro y ser poseedor del balón y va a haber un cambio muy grande respecto a la temporada pasada», señala.