Que los titulares no se los lleve la ropa interior

La Voz REDACCIÓN

TENDENCIAS

ETIENNE LAURENT | EFE

Tras la temporada de premios, ha quedado claro que las transparencias y los escotes de vértigo no están reñidos con tener que mostrar, obligatoriamente, más de lo que una quiere

06 mar 2015 . Actualizado a las 13:00 h.

Primero fue Cristina Pedroche. La encargada de dar las Campanadas en La Sexta, se enfundó en un vestido negro con escote de vértigo e infinitas transparencias y revolucionó durante días las redes sociales. De la noche a la mañana, pasó a ser el vestido, con mayúsculas, hasta que tres meses después llegó el dorado y blanco o negro y azul para robarle todo protagonismo. Con la prenda principal acaparando titulares, muchas mujeres se preguntaron por aquel entonces, qué ropa interior hay que elegir para enseñar sin que se vea más allá de lo necesario. La presentadora lo hizo atendiendo a esa máxima que persigue el bando femenino de no mostrar esa tira del sujetador que estropeé todo el estilismo.

Así, sin saberlo y, sin mucho menos esperarlo, marcó el camino a seguir para otras famosas -y no famosas- a la hora de afrontar la ruta de eventos y alfombras rojas que marcan la agenda de enero y febrero. Y, de esta forma, transparencias por un lado, y escotes de vértigo por otro, se consolidaron como las dos grandes tendencias que han dominado el armario de las estrellas del celuloide durante los últimos meses.

KEVORK DJANSEZIAN | REUTERS

Jennifer Aniston fue una de las primeras en sumarse a lo de perder centímetros de tela en el pecho. En los Critics' Choice Awards se decantó por un traje granate de Gucci, mientras que en los SAG Awards lució un diseño vintage de John Galliano. ¿La similitud entre ambos? El escote de vértigo decorado con un largo collar de ambas elecciones que acapararon todos los flashes. No fue la única. Dakota Johnson siguió el ejemplo de la rubia actriz de Friends luciendo escote en los dos estrenos de 50 sombras de Grey con dos vestidos, uno negro de Dior y otro blanco de Saint Laurent.

Aunque ambas intérpretes seguramente optaron por otras vías, para el resto de mortales, a la hora de enfrentarse a este estilo de escote, ya sea en V o abierto, lo ideal es jugarsela con sujetadores de copa baja o balcotte. Y es que para aquellos diseños con grandes escotes, ya sea cruzado o en V, necesitan un sujetador cuyas copas estén mucho más separadas entre sí y más bajas de lo habitual, como este Contouring Sensation Triumph en negro. Aquellos vestidos o camisetas con un escote bajo, ya sea redondo, cuadrado o drapeado, los balconette, de copa más baja y con los tirantes más separados que amplían la zona del escote hacia el cuello y los hombros, son la mejor y, casi única opción, como este Simone Péréle en color natural.

DANNY MOLOSHOK | REUTERS

Pero hay vida más allá de los escotes de vertigo. Si Jennifer Aniston fue su embajadora, Irina Shayk y Rita Ora lo fueron de las transparencias, eso sí, llevadas al extremo. Como si se hubiesen puesto de acuerdo, la modelo y la cantante se enfundaron en sendos diseños en negro que dejaban poco a la imaginación en la postfiesta de los Oscars que celebró Vanity Fair. Y es que el vestido de Versace de rejilla con cristales de la rusa y el de Donna Karan Atelier de la británica, enseñaban de todo, menos la ropa interior, provocando un debate en las redes sociales que debatían sí llevaban o no sujetador y braga.

Aunque los partidarios de la opción del no ganaron por goleada la discusión, muchas en su casa se quedaron con la duda de qué ropa interior podrían haber lucido de querer haber llevado ropa interior. La mejor opción para estos diseños tan complicados sería, probablemente, los sin costuras. Es decir, aquellos que recojan el pecho con acabado invisibles, que no se noten, sin costuras o lisos como este con foam en negro de Vanity Fair.

Christopher Polk | AFP

Por un lado, los escotes de vértigo y transparencias fueron las opciones más arriesgadas, pero no las únicas. Como todos los años, triunfaron en las alfombras rojas los diseños de palabra de honor. Nunca fallan, ya que son una apuesta segura para triunfar. Reese Witherspoon, por ejemplo, apostó por este estilo tanto para los Globos de Oro de Calvin Klein como para los Oscars de Tom Ford. Para ambas ocasiones, la actriz optó, seguramente, por un sujetador sin tirantes que suelen incorporar una fina tira de silicona para aportar una mayor sujección y seguridad como este Simone Péréle en negro. Y es que los hombros descubiertos requieren no llevar estas tiras subiendo por el pecho y la espalda.

MARK RALSTON | AFP

Y si no quieres llevar ni un vestido con escote de vértigo, ni con transparencias, ni de palabra de honor, otra de las tendencias que han dominado esta temporada entre las actrices fue la espalda al descubierto. Emma Stone se decantó por esta opción en los Oscars gracias a su vestido de Elie Saab que, iría acompañado por un sujetador multiposición, como este multiposición en negro de Selmark. Muy útil también para los cuello halter, este tipo de sujetadores se adaptan tanto al cuello como a la espalda descubierta gracias a sus largos tirantes que se pueden cruzar por casi cualquier sitio y terminar abrochados en la cintura.

Con un sujetador casi para cada tipo de diseño, no son los únicos recursos que tienen las mujeres para que lo que provoque los flashes sea el vestido y no la ropa interior. Para las faldas tubos, las fajas pantalón son perfectas para conseguir una cadera y un abdomen liso. En cambio, para los vestidos de corte New Look -aquellos muy ceñidos a la cintura y falda vaporosa-, lo ideal es jugarsela sobre seguro con un body para tener controlada la zona abdominal. ¿Y para las opciones más ceñidas? Sin duda, los vestidos faja, para que nada se note al cubrir desde el pecho, pasado por el abdomen hasta llegar a las caderas y los muslos. Con todas estas posibilidades, la ropa interior nunca será el problema, ni la que le de sorpresas inesperadas a las mujeres. 

* Todas las prendas de ropa interior se pueden encontrar en El Corte Inglés