Pedro García Aguado: «Ya he vivido al límite y ahora necesito estabilidad»

b. pallas REDACCIÓN / LA VOZ

TELEVISIÓN

La Sexta

Rechaza que «La isla» discrimine a las mujeres, que, según asegura, participarán en la segunda edición

24 may 2017 . Actualizado a las 07:35 h.

Pedro García Aguado conduce en La Sexta el reality de supervivencia extrema La isla, estrenado el pasado miércoles y que sorprendió a muchos porque entre sus catorce participantes no hay ninguna mujer

-¿Por qué «La isla» es un reto solo para hombres?

-El formato sí da cabida a mujeres, pero, según lo concibió el creador, está pensado para cuatro entregas: hombres, mujeres, mixta y celebrities. El formato no quiere comparar, sino trasladar a seres humanos a situaciones de supervivencia extrema. Si hay segunda edición veremos cómo 14 mujeres demuestran que son valientes, fuertes, serenas y capaces de hacer las cosas como se está viendo en la sociedad. No hay machismo de ningún tipo. 

-Islas, supervivientes... ¿qué aporta este formato al género?

-Lo que aporta es la supervivencia extrema y pura. El hecho de no ser un concurso no desvirtúa tanto el objetivo de la experiencia. Los 14 hombres que se han ido a la isla están desprovistos de todo, no tienen acceso a ningún tipo de civilización y esa es su gran diferencia, sin menospreciar al otro programa.

-Sin premio, ¿cuál es la motivación de los participantes?

-Cuando hablé con ellos antes de dejarlos allí, tenía esa misma intriga. Les pregunté si sabían a dónde iban, que iba a ser duro, que nadie les iba a dar un trozo de comida, pero para ellos esa era la verdadera motivación: no participar en un reality, sino vivir una experiencia de ese tipo. 

-¿Se enfrentaría usted a un reto parecido?

-No, a día de hoy no. No tengo la motivación que tienen los catorce protagonistas. Soy una persona que ya ha vivido al límite y no necesito ya más. Necesito estabilidad, tranquilidad y poder ayudar a los demás. Mi aportación fue aconsejarles acerca de cómo aprendí a tener serenidad para aceptar las cosas que no podía cambiar y a tener el valor para cambiar las que sí podía. Les dije que tenían que ser muy listos para saber qué cosas podían modificar y cuáles no, para no gastar energías inútiles en la isla.

-Programas como «Hermano mayor» o el reciente «Cazadores de trolls» cumplían un papel didáctico. ¿Es «La isla» un salto al entretenimiento?

-Una de las cosas que me atrajo del formato es que entendía que mi figura podía transmitir unos valores. Los participantes van a enfrentarse a situaciones complicadas y superarlas puede ser un mensaje bueno para el espectador a la hora de relativizar y afrontar las cosas con serenidad. Los espectadores me tienen como un presentador creíble y que genera confianza, así que me atrae lo que vaya en esa línea.