La versión más cruda de «Supervivientes» -no es un concurso, el premio es sobrevivir- se estrena con polémica
18 may 2017 . Actualizado a las 12:25 h.La Isla no es el Supervivientes de La Sexta. Ni hay famosos, ni insultos ni tirones de pelo los domingos mientras un grupo de celebridades cutres debaten en un plató. No hay pruebas y tampoco premio -debería serlo la mera supervivencia-. Por no haber, no hay ni mujeres. El reality, presentado por Pedro García Aguado, se estrenó este miércoles con polémica. ¿Por qué son hombres los 14 concursantes? ¿Es el formato demasiado extremo para incluir a mujeres?
Los buenos datos de audiencia y la naturaleza del programa -la aventura extrema, la ausencia de artificio- eclipsó un detalle que, sin embargo, no pasó desapercibido para algunos usuarios de Twitter, que, indignados, pronto se lanzaron a pedir explicaciones a través de la red social.
La respuesta nada tiene que ver con el aguante o la fortaleza femenina, sino con el formato original del programa, The Island with Bear Grylls. Su primera temporada incluyó solo a 14 hombres; la segunda, a 14 mujeres; y la tercera optó por una versión mixta. «Hemos querido ser fieles a eso -explicó el presentador en la Ser-. A partir de ahí queda la puerta abierta para que haya próximas temporadas mixtas o con solo mujeres».
Una isla deshabitada en mitad del Pacífico, a más de 8.000 kilómetros de España, es el hogar de los intrépidos participantes de la edición española, que cuenta con ocho capítulos. Producida por Atresmedia y Shine Iberia para La Sexta, se trata de una adaptación del programa de Channel 4, que en el 2014 registró picos de audiencia de más de tres millones de espectadores y que actualmente va por su cuarta temporada. El formato se ha exportado también a Francia, donde se acaba de estrenar la tercera temporada, Estados Unidos, Alemania, Holanda y Noruega.
Los supervivientes, que ni se conocen entre ellos, ni son expertos, ni han visitado antes el lugar, deberá narrar su propia aventura grabando ellos mismos su día a día. En el grupo hay cuatro cámaras profesionales que vivirán en las mismas condiciones que sus compañeros. La isla, elevada a once metros sobre el nivel del mar, tiene poco más de un kilómetro cuadrado y ocho kilómetros de costa. Hay selva, terreno rocoso, mareas peligrosas y otros peligros, como la manzanilla de la muerte, una planta tóxica.