Patrocinado por:

La Eurocámara rectifica y aprueba la reforma de la ley de «copyright»

Cristina Porteiro
cristina porteiro BRUSELAS / CORRESPONSAL

OCIO@

Miembros del Parlamento Europeo durante la votación del miércoles
Miembros del Parlamento Europeo durante la votación del miércoles VINCENT KESSLER | reuters

Los gigantes digitales deberán retribuir de forma justa a los creadores de contenidos

12 sep 2018 . Actualizado a las 23:14 h.

La atmósfera no podía ser más festiva en la Eurocámara. Entre aplausos, vítores y expresiones de alivio, los promotores de la nueva ley de copyright celebraron ayer en la sede de Estrasburgo la luz verde a su propuesta de protección de los derechos de autor en Internet.  

Tras largos meses de negociaciones, presiones, amenazas y traspiés, la ley por fin logró recabar el apoyo de la mayoría del hemiciclo (438 votos a favor, 226 en contra y 39 abstenciones). En el rostro de su ponente, Axel Voss, solo se podía leer felicidad. Entre abrazos y gestos de emoción, el alemán agradeció a sus colegas europeos su respaldo después de que su primera tentativa cayera en saco roto el pasado mes de julio. «Muchísimas gracias por este ejercicio común y este éxito que hemos cosechado. Es una excelente señal para la industria creativa en Europa», declaró ante la cámara.

No es para menos. Los esfuerzos por actualizar la obsoleta normativa del 2001 fueron torpedeados constantemente con campañas tendenciosas, patrocinadas por los gigantes digitales, para propagar el miedo entre los usuarios, asociaciones de consumidores y algunos partidos políticos a una posible censura de Internet. Ni Wikipedia va a desaparecer, ni los memes van a estar prohibidos. «Se trata de obligar a empresas como Google o YouTube a retribuir de forma justa a los creadores de contenidos», aseguran los defensores de la ley de copyright. Voss insiste en que estas empresas se han alimentado «explotando» a los investigadores, artistas y editores apoyándose en una legislación obsoleta. «Las grandes plataformas controlan el mercado de la publicidad, explotan nuestros datos, controlan lo que consumimos y, además, sin pagar lo que es justo a quien crea esos contenidos (...) Nadie acaba con la libertad en Internet, pero Internet no puede ser un territorio sin ley», subrayó ayer el diputado socialista, José Blanco.

La controversia no ha hecho más que aumentar con el resultado de la votación. Formaciones como Podemos rechazan sin fisuras la nueva ley. «Una vez más en la UE ganan los grandes poderes, los intermediarios, las SGAE y aquellos a los que se supone que íbamos a cortar las alas: las gigantes plataformas que, a partir de hoy, son nuestra policía en Internet», denunció su eurodiputada Lola Sánchez. La formación morada se refiere al polémico artículo 13.º de la ley en el que se establece la obligación por parte de los gigantes digitales a chequear todos los contenidos que compartan sus usuarios para comprobar si están sujetos o no a copyright y remunerar a sus autores si corresponde. 

Otro de los artículos que ha logrado pasar la criba es el 11.º. Según estipula el texto, los editores tendrán libertad para imponer tasas al uso digital de sus contenidos. Un derecho «renunciable» que el consejo solo quiere extender por un año, frente a los 20 años propuestos por la Eurocámara. «Se trata de una gran victoria política para los autores, la cultura y la democracia de Europa. El Parlamento Europeo ha elegido adoptar una legislación más equilibrada que beneficiará a ciudadanos, negocios y creadores europeos», aplaudió ayer la directora General de la Agrupación Europea de Sociedades de Autores y Compositores (GESAC), Véronique Desbrosses.