Un tercio de los niños entre 5 y 6 años tienen caries en los dientes de leche y l amitad de los adolescentes (a partir de 12 años), también
28 sep 2016 . Actualizado a las 01:20 h.Si tiene usted niños pequeños que están encantados de cepillarse los dientes, sepa que es usted una persona afortunada. La mayoría de los padres afrontan una batalla con sus pequeños varias veces al día, cuando los menores deben cepillarse los dientes. La higiene de la boca es fundamental para prevenir enfermedades durante la infancia y en la edad adulta y los expertos coinciden en que si los niños aprenden a cepillarse correctamente, lo harán bien el resto de su vida.
Es importante que aprendan, porque los errores en el cepillado tienen efectos directos en la salud. «El problema principal de salud bucodental de los niños españoles es la caries. Es el más prevalente. Sufren también problemas de encías, pero en menor medida», explica la odontóloga Paula Matesanz. De hecho, uno de cada tres niños de 5-6 años tienen caries y la mitad de los adolescentes (a partir de 12 años), también.
Un estudio en niños preescolares encargado por la Dirección General de Salud y Protección a los Consumidores de la Unión Europea señala que mayoría de los padres reconocen que es el niño el que realiza el cepillado y menos de un tercio de los padres se ocupan personalmente. El 22 % de los progenitores admite que sus hijos se cepillan sólo de vez en cuando.
«A esta edad se considera adquirida completamente la habilidad para realizar solos el cepillado, sin necesidad de la intervención del adulto, aunque sí con su supervisión», explican las vocales de Odontopediatría de la Comisión Científica del Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de la I Región (COEM) Paloma Planells y Mónica Miegimolle. Es en estas pequeñas batallas donde el entretenimiento se convierte en un aliado natural de los padres. Matesanz, experta en salud bucodental, señala que «la fase de adquisición de rutinas no puede ser percibida por el niño como un castigo».
«Sin duda, es importante introducir los buenos hábitos a través del entretenimiento. Es por eso que los cepillos infantiles cuentan con dibujos y personajes adaptados a sus gustos... El refuerzo positivo es fundamental». En esta era digital en la que Internet ha entrado en los hogares para cambiar la forma en la que nos relacionamos con el mundo, las tecnologías abren la puerta del baño y con ellas entra una nueva fórmula de entretenimiento: cepillos conectados a través de bluetooth a móviles o tablets, que vienen a reforzar el mensaje positivo.
Cepillarse los dientes es necesario, y también puede ser divertido. La mayoría de los hábitos de higiene en el hogar se adquieren por imitación de los adultos. Por este motivo, Planells y Miegimolle insisten en «la responsabilidad de los padres de ejercer de modelos para la adquisición de buenos hábitos desde la infancia temprana».
Los niños españoles no se cepillan bien los dientes
Hay que cuidar los dientes desde el nacimiento del niño, pero no solo se trata de cepillarlos. Hay que cuidar la alimentación. Los niños aprenden lo que ven, no lo que se les dice que hagan, por lo que es fundamental la actitud de los padres... «No se puede comer cualquier cosa entre horas. Los padres saben que las chuches no son buenas para los dientes, pero no es lo único. Las bebidas embotelladas, los zumos, las galletas... no deben ser consumidos entre horas». Y después de cada comida, cepillado. Siempre.
Claves de un cepillado correcto
1. Cepillarse siempre después de cada comida
2. Cepillarse bien los dientes (2-3 minutos)
3. Los espacios interdentales, la lengua y las encías
4. Visitar al dentista cada seis meses
5. Control de la alimentación para que los dientes estén sanos
La importancia de la alimentación
«Hay que cuidar también los dientes de leche. Requieren los mismos cuidados, puesto que no son inmunes a la caries. En los pequeños, además, cuando aparecen las caries el tratamiento es más molesto puesto que es más difícil que el niño entienda el dolor... Además, una enfermedad en el diente de leche se puede transmitir al definitivo, que está debajo», añade Matesanz. Las doctoras Planells y Miegimolle estiman que el cepillado debe ser de «2-3 minutos, después de cada comida» y recuerdan la importancia de controlar «los azúcares en la dieta, sobre todo, entre horas». Los expertos coinciden en que los errores en el cepillado parten de que el mensaje que reciben los niños es que hay que limpiar los dientes, pero un buen cepillado va más allá.
Es fundamental la limpieza interdental, la lengua, las encías... «En muchos casos, cuando se cepillan los niños no saben realmente qué están haciendo y es un error dar autonomía al niño cuando es muy pequeño», explica Matesanz.