El diseñador destaca que el programa de los ochenta «trata de construir cosas y no de destruirlas»
01 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Alexey Pajitnov (Moscú, 1956), creador del Tetris, recibió un premio honorífico del Fun & Serious Game Festival de Bilbao como nombre destacado de la industria del videojuego. Tetris fue replicado mil veces y marcó a varias generaciones de jugadores.
-¿Se va a menudo a la cama viendo caer piezas del «Tetris»?
-Claro que me ha ocurrido. Pero dura poco y luego duermes francamente bien (ríe). Creo que es un efecto psicólogico que tiene que ver con el desarrollo de una actividad muy intensa y me ha pasado con otros juegos.
-¿Recuerda cuándo y cómo diseñó «Tetris»?
-En el verano del 84. Estaba muy feliz porque al fin tenía una ordenador personal. Hasta entonces trabajábamos con un gran ordenador central, llamado BSM 6, y distintas terminales. Se necesitaba una sala enorme. Pero llegó el Electronika 60 en una caja grande y muy pesada, con un monitor, que al menos estaba sobre mi escritorio. ¡Era increíble para la época! Su sistema operativo era muy fácil de entender. Tenía una herramienta maravillosa y empecé a jugar y hacer puzles. Uno de los juegos de mesa que más me gustaba era el Pentominó, con distintas piezas diseñadas a partir de cinco cuadrados que había que unir para hacer puzles, e intenté llevarlo al ordenador.
-¿Supo que sería un éxito?
-No. Simplemente pensé que sería divertido. Durante una semana estuve programando y tenía lo básico. No había puntuación, no había explicaciones y la velocidad no iba en aumento, pero el título ya empezaba a respirar en la pantalla. Ahí me di cuenta de que tenía algo importante entre manos porque, pese a que tenía que depurarlo y acabarlo, ¡no podía parar de jugar! (ríe).
-¿Cuáles cree que son las claves del éxito de «Tetris»?
-En primer lugar, que es un juego muy sencillo. Trata sobre construir cosas y no sobre destruirlas. De ordenar el caos, frente a los juegos de disparos de la época. Entonces, además, los ordenadores personales eran algo reciente y la gente tenía una barrera natural y psicológica para trabajar con ellos. Jugar al Tetris quitó ese miedo, rompió la barrera, porque la gente vio algo adictivo, sencillo y atractivo. A finales de los 80 conseguimos una marca muy fuerte porque también trabajamos muy duro.
-En 1989, Gameboy, primera consola portátil de Nintendo, se vendía con el juego. Se despacharon 40 millones de unidades. ¿«Tetris» habría triunfado sin la consola?
-Es difícil saberlo. La historia de Tetris tiene muchos hitos afortunados y Gameboy fue uno. En cierto modo fue casi místico, porque parece que el juego y la consola fueron hechos el uno para la otra. Fue un título excelente para una plataforma revolucionaria que ayudó, además, a llevar los videojuegos a los adultos, porque su contenido es abstracto. Fue un título perfecto para introducir la plataforma, y la plataforma perfecta para Tetris. Sigue siendo mi versión favorita.