Anunció el estreno de una película en la Red al mismo tiempo que en las salas
05 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Las grandes cadenas de salas de cine de Estados Unidos anunciaron ayer que no proyectarán la película Beast of No Nation, que se anuncia a priori como una de las claras candidatas a los Óscar el año próximo. Y no lo harán porque la plataforma de alquiler de películas en línea Netflix ha comprado también los derechos de distribución.
Los cines estadounidenses se quejan de que, en esta ocasión, Netflix no ha respetado el acuerdo tácito que existía entre las salas de cine y las televisiones para que estas no emitieran películas de estreno hasta que no transcurrieran noventa días desde su lanzamiento en los cines. Con Beast of No Nation, Netflix anunció, tras hacerse con sus derechos de distribución el pasado lunes, que la pondría a disposición de sus suscriptores el mismo día que se iba a estrenar en los cines sin ningún coste adicional.
Esto mismo había ocurrido antes con otras películas en plataformas como Amazon, Google Play o iTunes pero siempre con películas de bajo presupuesto, por las que además estas plataformas cobraban a sus clientes y que generalmente llegaban a salas dedicadas al arte y ensayo en las grandes ciudades.
Pero Beast of No Nation es otra cosa. Se trata de una película de cine de masas basada en un best seller que narra la historia de un niño soldado en África y aspira a entrar en los Óscar del 2016. Esa ha sido la razón que está detrás de la maniobra de Netflix.
Después de demostrar, sobre todo con House of Cards, que domina el mundo de las series, la plataforma de vídeo en línea ha decidido que también quiere jugar en la liga de las películas. En la subasta para la distribución del título elegido Netflix ha pagado doce millones de dólares, que es el doble del presupuesto de la película.
Netflix tenía, en julio del 2014, más de cincuenta millones de suscriptores, 36 de ellos en Estados Unidos y está presente en cuarenta países. Uno de los países europeos donde no ha llegado todavía es España, aunque el año pasado circularon rumores sobre la intención de la plataforma de instalarse aquí en el último trimestre de este año, una noticia que por el momento no ha sido confirmada ni negada por Netflix.
La principal razón que mantiene a Netflix fuera de España son los altos índices de piratería de películas y series que se registran, lo que a los ejecutivos de la plataforma les hace dudar de que su negocio de suscripción funcione como en otros países.