Mario Vaquerizo: «Las Rubias seríamos perfectas para Eurovisión, porque todo va en playback, menos la voz»

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

XOAN A. SOLER

Genio y figura, Mario Vaquerizo ha estado esta mañana en Santiago para promocionar su último libro, una recopilación de 50 rockeros para público infantil: «A mí me parece más auténtica Lola Flores que Sid Vicious, y siempre lo diré»

25 abr 2019 . Actualizado a las 23:07 h.

«Por cierto, se lo estoy diciendo a todo el mundo. Quiero volver a actuar en la plaza del Obradoiro, que no he vuelto desde el 2007». Es periodista, cantante, mánager, artista. Y ahora, escritor de literatura infantil. Mario Vaquerizo (Madrid, 1974) ha estado en Santiago para presentar Cuentos para niños rockeros, algo así como una declaración de intenciones a través de las historias de 50 artistas. Porque Lola Flores es más rockera que los Sex Pistols.

-Lo primero, muchas felicidades por ese 20 aniversario con Alaska.

-¡Ah, muchas gracias! Bueno, estamos en el año pero la fecha esta por llegar, es el día 10 de junio, pero empiezo a celebrarlo el día 8. Estoy preparando un aniversario por todo lo alto con mi niña. Las cosas bonitas hay que celebrarlas siempre. Los aniversarios son como los cumpleaños, porque significa que la relación está viva. Cuando cumples años es también porque estás vivo.Yo respeto a la gente que no le gusta celebrar sus cumpleaños, pero yo los celebro constantemente porque eso significa que estamos aquí y que nos gusta mucho esta vida. La otra no sabemos como será, pero esta es maravillosa, por lo menos en mi caso, ¿sabes? Por eso trato de exprimirlo y de llevarlo de la mejor manera posible, siempre con sentido común, con coherencia pero disfrutando, porque al fin y al cabo me siento muy afortunado, porque todas las cosas que hago no dejan de ser mis aficiones y he conseguido que mis aficiones se conviertan en mi medio de vida, con lo cual trabajo mucho pero...

-No lo ves como un trabajo.

-No me cuesta. Para mí no es un esfuerzo estar contigo aquí hoy, charlando acerca del libro, o acerca de un disco... Me gusta. Me gusta porque yo también soy periodista, me gusta estar en todos lados y hablar mucho. Hablo más que un loro, tengo incontinencia verbal... Y ahora últimamente estoy tratando de conseguir tener el don de la ubicuidad, me encantaría estar en diez sitios a la vez.

-Eso nos gustaría a mucha gente, la verdad.

-Bueno, estoy a punto de ello ¿eh? porque en menos de tres días he estado en Barcelona, Madrid, Santiago... Vamos, que me muevo más que un maricón en una feria. Pero todo es chulo, ¿sabes?

-Te llega ese aniversario y esta etapa tan feliz después de un momento un poco complicado. La salud, ¿qué tal?

-¡Pues estoy bien! Vamos a ver, todo se magnifica, y en este tiempo de tuits y de titulares como muy impactantes, porque ha cambiado todo, yo jamás pretendí intranquilizar a nadie. Simplemente yo me muestro tal y como soy, para lo bueno y para lo malo. Sí es cierto que he tenido una crisis de salud producida por unas protusiones y una especie de artrosis degenerativa que tengo, pero que no es una cosa tan grave, porque desgraciadamente hay enfermedades mucho más graves. Nadie busca la enfermedad, pero bueno, si me emborracho y luego me duele la cabeza soy consciente de que es por eso, o cuando me he operado de la cara doy por hecho que el posoperatorio es duro y ya estás predispuesto al dolor. Pero que de la noche a la mañana te levantes y no puedas mover tu brazo izquierdo te preocupa mucho y sobre todo te mina mucho tu carácter. Y en mi caso, que soy una mariquita inquieta, que me muevo a todos lados, tener que estar tres meses sin poder moverte... Empiezas a dejar de ser tú, y a mí me gusta mucho como soy yo. Son problemas que están controlados, estoy en manos de un fisio, de Jaime, que además se ofreció a tratarme al verme en televisión, yo no le conocía. Estamos trabajando mucho juntos y he podido recuperar la movilidad del brazo izquierdo y estoy bien. También creo que la actitud con la que afrontar un determinado momento más doloroso también hace mucho que salgas adelante. Yo soy muy positivo, hasta en los momentos más negativos trato de sacar el lado bueno. Y mira que el día a día está lleno de momentos negativos, incluso la vida, que tiene dramas y tiene comedias. Lo que pasa es que yo soy más de la comedia, del vodevil y de la astracanada. [Sonríe].

-Bueno, vamos entonces con tu último libro. Así que Lola Flores es rockera.

-Por supuesto. Este libro, al fin y al cabo no deja de ser una declaración de principios. Para mí Lola Flores es una rockera porque en todo momento hizo lo que quería, fue dueña de su vida y buscaba el reconocimiento por ella misma, no en los demás. Para mí esa es la verdadera esencia del rock and roll. Siempre digo y llevo diciendo todos estos días que el rock no solamente es ponerte una chupa de cuero y cantar canciones más o menos rockeras. Es ser dueño de tu vida. Y por eso esos cincuenta rockeros o rockeras que he elegido en este nuevo libro son múltiples y variados. Está Prince, están Los Ramones, está Elvis, que es el rey del rock, pero también está Michael, que es el rey del pop, y también está Britney Spears, y Rafaella Carrá y Camilo Sesto, están los Village People, Sigue Sigue Sputnik... es decir, no deja de ser un reflejo de lo que es mi banda sonora en estos 44 años, a punto de cumplir 45.

-Lola Flores es rockera, pero Sid Vicious y Sex Pistols, no.

-Pues sí, pues mira, está muy bien dicho. Porque creo que se creyeron mucho el papel cliché, el cliché absurdo de sexo drogas y rock and roll. Creo que Sid Vicious, con todos mis respetos, y mira que a mí God save the Queen me encanta, en su día a día me parecía un cómico, un personaje que se creyó demasiado..

-Una caricatura.

-Como una caricatura. A mí me parece más auténtica Lola Flores que Sid Vicious, y siempre lo diré. Porque al fin y al cabo fue dueña de su vida e hizo lo que quería hacer en todo momento, no lo que creía que tenía que hacer para trascender.

-Está claro que de clichés no eres. Ni siquiera de pequeño, y por eso te llevaste alguna pedrada y bastantes insultos.

-Me sigo llevando pedradas ahora también ¿eh? Yo estoy siempre apedreao, pero no me importa, no lo veo como un drama tampoco. Lo que pasa es que en el fondo soy una persona a lo mejor muy arrogante, porque en el fondo estoy muy seguro de quien soy, de a dónde voy y de dónde vengo y qué modelo me pongo. Te quiero decir que yo me muestro tal y como soy más allá del reconocimiento de los demás y claro que me llevo muchas pedradas, pero no lo veo como que he sido un niño que ha sufrido mucho. Para nada. He tenido una infancia súper feliz, he tenido la suerte de tener unos padres maravillosos y un entorno que ha hecho también que yo sea lo que hoy a día de hoy. Lo que pasa es que  no seguí los clichés que te venían dados por el mero hecho de ser un chico que había nacido en el año 74, cuando lo que tenía que gustarte era dar patadas a un balón. A mí eso me aburría soberanamente. Yo me cambié a la vida cuando vi a John Travolta en Grease. Es verdad que cuando eres más adolescente sí sufres un poco que te insulten, que te tiraran piedras... Pero yo tenía mi refugio, que era mi universo, que estaba repleto de revistas de Super Pop y de El Gran Musical y yo era muy feliz. Nunca fui un niño atormentado, simplemente es que no va con mi carácter. El carácter también te viene dado, yo tengo la suerte de que tengo un ADN muy pragmático y muy resolutivo, y no quiero transmitir esa sensación de que he sido un niño que lo he pasado mal. No. Todos lo pasamos mal y en la adolescencia todos lo pasamos mal, juegues al fútbol o no, porque te estás descubriendo, tienes muchas dudas, a nivel físico no te encuentras bien... En mi vida siempre he tenido claro que querer es poder y he acabado siempre haciendo lo que he querido.

Yo estoy siempre apedreao, pero no me importa, no lo veo como un drama tampoco

-Nombrabas a Michael Jackson. Le haces sitio en tu lista, con la que está cayendo con «Leaving Neverland».

-Es que yo siempre le voy a hacer sitio a Michael Jackson, porque Michael Jackson forma parte de mi vida. Yo no soy amigo de Michael Jackson, no lo he conocido a nivel personal, pero tengo la capacidad de saber separar muy bien lo que es la vida y la obra de las personas.

-Así que crees que hay que separar la creación de creador.

-Yo creo que sí. Yo no quiero ser amigo de Michael Jackson, yo quiero admirar a Michael Jackson. Y yo lo admiro porque ha hecho discos maravillosos, ha hecho un vídeo, Thriller, que me impactó con 8 añitos, en las Navidades de 1984 que se emitió en TVE, que desgraciadamente esas cosas ya no pasan porque la televisión está fatal, a nivel musical me refiero. Yo cuando veo Thriller me quedo con esto, después lo que cada uno que haga en su casa ni me va ni me viene. Entiendo que haya gente que eso le afecte, y gente que ha sido fan de Michael y dejan de serlo. Pero yo como fan tampoco me ha sorprendido nada, porque si realmente tú ves un poco a Michael no era normal que se le viese siempre con un niño de la mano. Pero tampoco me parece normal que una madre permita eso. Yo vengo de una familia muy tradicional, con valores muy establecidos y muy tradicionales. Mi madre a mí jamás me hubiera dejado que me fuese a casa de Ana Torroja a dormir con ella, porque no es normal. Mi madre jamás hubiera dejado a mi padre y al resto de mis hermanos haberme llevado a otro país para conocer a mi ídolo. Si pedimos responsabilidades, responsabilizamos a todos. Entonces, ¿qué pasa? Pues que no lo puedes decir, porque por lo políticamente correcto ahora tenemos que hacer un linchamiento contra Michael. Pero yo me quedo con el Michael artista. Yo tengo mucha capacidad de abstraerme de lo que haya hecho, y por otro lado también, si nos llenamos la boca diciendo que hay que creer en la Justicia... ¿Creemos o no creemos? Porque fue dos veces absuelto. Y esos niños que ahora están diciendo eso fueron a testificar a favor de Michael diciendo no hacía nada., entonces, cariño... Si pedimos responsabilidades se las pedimos a todos. Y no estoy justificando ningún acto deleznable, para nada. Además son detalles que no me gustan, porque generan como mal rollo y a mí el mal rollo me da mucha alergia. Prefiero quedarme con las cosas bonitas y Michael musicalmente hablando ha hecho cosas muy bonitas y ha marcado a muchas generaciones. Para mí Michael es un rockero en el sentido de que daba tanta importancia a las composiciones como a la puesta en escena, por eso convive en mi libro con los Kiss o con Rafaella Carrá.

-O con Bowie.

-Me hace mucha gracia también la gente que ahora habla todo el rato de Bowie porque se murió, pero es que hace tres años nadie conocía a Bowie. Pero me alegro, porque ese es verdaderamente el triunfo de Bowie. Una marciana, uno que le llamaban maricón porque se teñía el pelo y ahora todos esos padres, que son hijos de los abuelos que no querían a la gente excéntrica, a su niño le ponen el rayo. Pues ole el coño de David Bowie. Es que de verdad, la gente no es honesta. Bowie era tan listo que hizo una puesta en escena hasta para despedirse, que es maravilloso. Y después que David Bowie es David Bowie. Claro, es que yo vengo de ahí. Yo no vengo de la canción protesta, no vengo de lo combativo, ni de la denuncia. Yo vengo del pop y del rock, que es todo bonito.

-Del vodevil, que decías.

-Y de la astracanada. Que también es una rockera Lina Morgan, y Norma Duval y Jenny Llada, y esas grandes vedettes de los años 70, que eran actrices pero que las otras consideraban que como se destapaban eran menos actrices. Pues hacían películas, solo que hay muchos géneros. Está el destape y está el arte y ensayo, pero es el mismo arte.

Yo no quiero ser amigo de Michael Jackson, yo quiero admirar a Michael Jackson. Y yo lo admiro porque ha hecho discos maravillosos

-Hablando de eso, ¿qué tal Sant Jordi?

-¡Pues muy bien!

-Porque hay escritores que tiene una idea concreta de lo que es literatura y lo que no lo es.

-Pero esos son escritores que son fundamentalistas y en todos los ámbitos te los encuentras, en la música también. Habrá gente que cuando lea mi libro dirá, pero este tío se ha vuelto loco, es un gilipollas, cómo puede decir que Lola Flores es una rockera. O Charo Baeza, la murciana más internacional que triunfa en Las Vegas con el Cuchi cuchi. Pero eso es el fundamentalismo que existe en todos los gremios. Creo que el fundamentalismo y los dogmas lo que hacen es que te pierdas cosas, porque te estás autocensurando. Entonces, claro, como que te da vergüenza que te guste la canción de los Village People YMCA. Pues es que es maravillosa, y también son maravillosas las canciones de Los Ramones... Si son canciones bonitas por qué te las vas a perder por el mero hecho de que tengas que estar en un sitio o en otro. Yo es que estoy en todos los lados y en ninguno.

-Esto de las críticas y el fundamentalismo también afecta a la tele y a formatos como «Supervivientes». Tú dijiste que no.

-Pero dije que no pero no porque esté en contra. Te digo una cosa. Hoy, yo tenía pensado llegar a mi casa a las siete y media u ocho, ir a la exposición de mi amiga Topacio Fresh en la Fresh Gallery, que inaugura, y después me voy corriendo con mi mujer a ver Supervivientes con la Pantoja. Yo cuando he dicho que no no es porque esté en contra de esos formatos, porque yo no estoy en contra de nada. Cariño, ¿el primer reality de España quién lo hizo? Alaska y Mario. Lo que sí es cierto es que soy más cobarde o sé que en determinadas situaciones no voy a estar cómodo y decido no hacerlo. Pero como espectador aplaudo Supervivientes. Yo no soy prejuicioso con nada, pero la gente sí. Además mira, hay un dato muy importante. La gente es tonta. Y la gente miente. Se mienten a ellos mismos, pero a mí no me mienten. Nadie ve Sálvame. Mentira.

-Pues las cuotas de «share» que tiene dicen otra cosa.

-Lo ve todo el mundo, claro. «Cómo puedes ver eso, si es horroroso». ¿Y tú como sabes si es horroroso? ¿Lo has visto? Porque para juzgar tendrás que ver algo. Están todas enganchadas a todo. Pero la gente es tonta y no lo quiere reconocer, y yo lo reconozco absolutamente todo, y si tengo que decir mierda, digo mierda, y si tengo que decir coño, digo coño, como decía La Veneno, otra grande. En el fondo eso es lo que me da libertad, porque estamos en unos tiempos en los que esta dictadura de lo políticamente correcto en algunos momentos me ha tentado a que me autocensure, pero yo no creo en la represión.

-¿De decir esto no lo digo, no vaya a ser?

-En el libro he escrito lo que he querido y si tengo que decir mariquita digo maricón con acento en la o, porque para mí no es un insulto, yo trato de hacer las cosas con mucho respeto. Pero sí es cierto que cuando haces promoción, a veces dices, uy, no voy a decirlo porque después no me compensa tener que estar justificándome todo el rato y además por un día, porque esos titulares duran un día.

-Ni un día.

-Ya ni eso. También ha cambiado mucho la forma de hacer periodismo, yo soy periodista a la vieja usanza. Ahora todo se basa en las declaraciones del tuit. Y son opiniones, no información. Muchas veces dan como información la opinión de terceras personas que se refugian en el anonimato. Y después que el Twitter este de mierda, con perdón, se ha convertido en un patio de porteras, que a mí me encanta, pero el patio de porteras antiguamente te lo decían a la cara. En el fondo, metiéndote conmigo me estás dando muchas más alas, porque estás perdiendo el tiempo en hablar de mí, cosa que yo no podría hacer, primero porque no me interesa, no sé quién eres y porque tengo mucho trabajo que hacer. Háztelo tú mirar que estás metida en tu casa, agobiada y amargada, despotricando sobre lo que hacen las demás personas, que al fin y al cabo no pretenden nada más que pasárselo bien y hacer en todo momento lo que quieran con humildad, con prudencia y siendo dueños de su vida.

-A Supervivientes dijiste que no porque ibas a pasar momentos incómodos. ¿El no a Eurovisión de las Nancys Rubias fue por lo mismo?

-Es que las Nancys Rubias es otra cosa, que es otra marcianada también. Las Nancys Rubias es un grupo de amigos que llevamos ya 15 años, no paramos de actuar, no sonamos en ninguna radio porque nos consideraron unas mamarrachas, pero existimos. Claro que es trabajo, porque te vas profesionalizando porque también te pagan por ello. Pero nunca tuvimos esa pretensión. Y yo digo ¿ahora Eurovisión? A mí, Eurovisión como concepto me divierte un montón y durante mucho tiempo era de los que quedaba en casa y hacíamos las votaciones con Olvi y con todo eso. Pero después ver en todo lo que se ha convertido... Como que me da pereza. Me da pereza también porque si me voy a Eurovisión quiero ser profesional y quiero ganar, como cuando fui a MasterChef. Yo pensaba que yo no era nada competitivo y gracias a MasterChef me he dado de cuenta de que si hago un concurso quiero ganar. Pero también soy consciente de que si ganar Eurovisión implica estar seis meses solo dedicándome a eso, no me lo puedo permitir, porque tengo otros trabajos que también me gustan mucho y que no estoy dispuesto a sacrificar. A mí Eurovisión sí me gusta, pero me gustaba más cuando el maestro Leiva dirigía la orquesta. A ver. Las Nancys seríamos perfectas para Eurovisión, porque todo va en playback, menos la voz, que es lo que hacemos desde siempre. La música va pregrabada y la voz va en directo. Cuando decíamos que no tocábamos no significa que yo no cante, yo canto bien, y después de 15 años canto fenomenal, porque es una cuestión de aprendizaje. Yo creo que las Nancys seríamos perfectas para Eurovisión porque la gente que va hace lo que hacemos las Nancys desde hace 15 años. Pero claro, llévate tú a las nancys: una trabajando, la otra no... Serían muchos quebraderos de cabeza. Nos quedamos en la Nancyfurgo, que estamos muy bien. Aunque tendríamos canciones muy buenas para ganar. [Se ríe]. Pero no me abras ese melón, cariño...