Padres gallegos de niños de vientres de alquiler, con problemas para volver de Ucrania

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

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Imagen de archivo CARLOS CASTRO

Decenas de familias españolas se ven afectadas por un cambio que impide registrar a sus bebés como españoles

29 ago 2018 . Actualizado a las 09:41 h.

En España no es legal la gestación subrogada, por lo que las familias que deciden tener hijos mediante este procedimiento recurren habitualmente a cuatro países: Estados Unidos, Canadá, Ucrania y Georgia. Sobre todo viajan a estos dos últimos, ya que el coste económico es muy superior en los estados norteamericanos. Pero un cambio en el reglamento europeo de protección de datos está complicando la situación de decenas de familias que están en Kiev, la capital de Ucrania, y que, de momento, no pueden traer a sus hijos a España. Entre ellas, hay al menos dos parejas gallegas.

La posibilidad de regulación llegó al Congreso, pero el PSOE se mostró contrario Cuando se producía un nacimiento por gestación subrogada en Georgia o en Ucrania, el consulado español tomaba muestras de ADN al padre, las enviaba a España, y una vez reconocida la paternidad aquí, la madre iniciaba el proceso de adopción, ya que la legislación española reconoce como progenitora a la gestante. ¿Pero qué está ocurriendo? Que desde el 5 de julio el consulado se niega a tomar las muestras de esta prueba de ADN por una cuestión de protección de datos. Esto impide que las familias inscriban a los pequeños como españoles y se los traigan, por lo que solo les queda una opción, tramitar la ciudadanía ucraniana del menor en Ucrania y una vez obtenida viajar con el pasaporte a España, un procedimiento que puede durar tres meses.

Ana Miramontes, abogada gallega experta en gestación subrogada, asegura que las familias no están atrapadas, aunque entiende que su situación allí no es cómoda. Una vez obtenida la ciudadanía del bebé en Ucrania, «aquí no van a tener problema», aunque deben iniciar un proceso judicial para regularizar la filiación tanto materna como paterna de su hijo. En cuanto a Georgia, las familias que acudieron a ese país ya estaban en proceso de inscripción de sus hijos, por lo que aunque les afecta el mismo reglamento de protección, las pocas familias que estaban allí tenían a sus niños inscritos como españoles.

Irregularidades

Hace unos meses, el Ministerio de Asuntos Exteriores emitió un comunicado desaconsejando la maternidad subrogada en Ucrania. En realidad la desaconseja en cualquier país «por no tener cabida en el ordenamiento jurídico español». Pero en el caso concreto del país ucraniano las autoridades españolas lanzaron la voz de alarma al recordar que en los últimos meses se detectaron estafas y engaños por parte de las clínicas de reproducción asistida, e incluso mala praxis médica con las mujeres gestantes. Respecto a las familias en Ucrania que se encuentran aguardando, Exteriores sostiene que les dará asistencia consular.

En España, la gestación subrogada estuvo en el debate político hace unos meses, ya que Ciudadanos llevaba en su programa la regulación. No obstante, la llegada del PSOE al Gobierno aleja la posibilidad de su legislación. De hecho, a finales de junio el Congreso de los Diputados acogió un tenso debate sobre esta maternidad, en donde los socialistas dejaron clara su postura contraria a que se legisle en España.