Uno de los fugitivos más buscados se escondió del FBI durante 37 años gracias a una habitación secreta de su casa

La Voz

SOCIEDAD

Donald Eugene Webb
Donald Eugene Webb Reuters

El cadáver de Donald Eugene Webb, acusado de asesinar a un policía en 1980, fue localizado enterrado en el jardín de su propia vivienda

17 jul 2017 . Actualizado a las 21:13 h.

Donald Eugene Webb, acusado de asesinar a un policía en 1980, figuraba desde hace décadas en la lista de los fugitivos más buscados por el FBI. La semana pasada se resolvió el enigma: Webb llevaba años muerto y su cuerpo había sido enterrado en el jardín de su casa. ¿Fin de la historia? Todo lo contrario. Este descubrimiento ha llegado casi al mismo tiempo que se ha sabido que el delincuente estuvo refugiado en una habitación secreta de su vivienda hasta su muerte en 1999 y los familiares del agente asesinado quieren que su mujer pague por ello.

Tras casi 40 años en busca y captura, el FBI encontró el cuerpo enterrado en el jardín de su casa de Boston, Massachusetts. Esto ocurrió días después de descubrir dentro de un armario de la vivienda una puerta que accedía a una habitación pequeña y secreta, y que se cerraba desde el interior. Ahí, Webb se escondió durante años con la ayuda de su mujer, Lillian, que a día de hoy sigue viviendo en la casa.

En diciembre de 1980, Webb, un ladrón de joyas vinculado a las mafias de la costa este de Estados Unidos, mató al jefe de policía de Saxonburg en Pensilvania, tras un forcejeo. El autor del homicidio resultó herido en la pierna y fue acusado por las muestras de sangre descubiertas en su coche dos semanas después. El caso generó gran expectación y el FBI le buscó durante meses. La recompensa por dar con él llegó a alcanzar los 100.000 dólares.

Nunca se volvió a saber nada de él hasta que el FBI logró nuevas pistas, relacionadas a otro delito, para volver a registrar su casa. Según una investigación periodística del Pittsburg Post-Gazzete, la habitación secreta fue construida ilegalmente y no era parte de la estructura original de la casa. El delincuente se refugió en ella hasta su muerte por causas naturales a los 60 años.

Ahora la mujer del policía difunto, Mary Ann Jones, presentó una denuncia por conspiración contra la esposa de Webb. Considera que los familiares del asesino de su marido deberían ser llevados ante la justicia por esconderle, pero las autoridades pactaron inmunidad con la mujer del fugitivo, de 82 años, a cambio de colaboración. «Ayudó y conspiró con un hombre buscado por asesinar. Enterró el cuerpo en su jardín. Es increíble», afirmó Jones en una entrevista con The Boston Globe.