El galardón de la Concordia hace bandera del europeísmo

LA VOZ OVIEDO

SOCIEDAD

JAN BAUER | EFE

El jurado concede el premio a Unión Europea en el año del 60 aniversario de los Tratados de Roma, el Brexit y la llegada de Trump

21 jun 2017 . Actualizado a las 23:08 h.

Los Premios Princesa de Asturias 2017 cierran su listado de galardonados de este año con un claro gesto de defensa del europeísmo. Coincidiendo con el 60 aniversario de los Tratados de Roma y en el año del Brexit, la llegada a la presidencia de Donald Trump y el auge del ruido xenófobo, nacionalista y populista en Europa, el jurado más institucional de cuantos deliberan en los premios ha decidido conceder el premio de la Concordia a la Unión Europea. «La UE ha logrado el más largo período de paz de la Europa moderna, colaborando a la implantación y difusion en el mundo de valores como la libertad, los derechos humanos y la solidaridad», argumenta el acta del jurado, que añade: «Estos valores de la UE proyectan esperanza hacia el futuro, en tiempos de incertidumbre, proponiendo un ejemplo de progreso y bienestar».

«La unidad europea, que dio comienzo como el sueño de unos pocos, se convirtió en la esperanza de muchos». El jurado parece haberse hecho eco de esas declaraciones del presidente del Consejo de Europa, Donald Tusk, en la conmemoración del 60 aniversario de los Tratados de Roma: «O Europa, entendida como entidad política, permanece unida, o dejará de existir. Solo una Europa unida puede ser una Europa soberana respecto al resto del mundo», declaró Tusk en la ceremonia celebrada en el Campidoglio romano en la que se renovó «la alianza única de naciones libres que iniciaron nuestros ilustres predecesores hace sesenta años a pesar de todas las circunstancias trágicas de la historia reciente, depositaron toda su fe en la unidad de Europa». Todo ese espíritu es el que ahora se premia desde Asturias.

Los Tratados de Roma. efeméride que ha dado pie al galardón, fueron los documentos constitutivos de la Comunidad Económica Europea (CEE) y la Comunidad de la Energía Atómica (CEEA) que se firmaron el 25 de marzo de 1957 y entraron en vigor el 1 de enero de 1958. El momento más decisivo de una larga historia que se iniciaba con la firma del Tratado de París por el que, un 23 de julio de 1952, se creaba la Comunidad Europea del Carbón y del Acero, que establecía un mercado común del carbón y del acero.

El jurado presidido por el jefe del Ejecutivo asturiano, el socialista Javier Fernández Fernández, ha estado integrado por Íñigo Abarca Junco, Fernando de Almansa Moreno-Barreda, vizconde del Castillo de Almansa, Antonio Basagoiti García-Tuñón, Santiago Bergareche Busquet, Antonio Brufau Niubó, Sol Daurella Comadrán, José Manuel Entrecanales Domecq, Isidro Fainé Casas, Felipe Fernández Fernández, Pedro Luis Fernández Pérez, Emilio Ferré Solé, Ignacio Garralda Ruiz de Velasco, Alicia Koplowitz Romero de Juséu, marquesa de Bellavista, Wenceslao López Martínez, Laureano Lourido Artime, Teresa Mallada de Castro, Adolfo Menéndez Menéndez, Carmen Moriyón Entrialgo, María del Pino Calvo-Sotelo, Pilar Platero Sanz, Mariano Puig Planas, Matías Rodríguez Inciarte, Gonzalo Sánchez Martínez, Pedro Sanjurjo González, Andreas Schierenbeck, Antonio Suárez Gutiérrez, Ángel Antonio del Valle Suárez, José María Villanueva Fernández y el expresidente asturiano Pedro de Silva Cienfuegos-Jovellanos como secretario.