Cáritas: «En España, tener hijos es un riesgo de pobreza porque las políticas de familia van a la cola»

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

SOCIEDAD

José Manuel Casal

Gracias al convenio de colaboración con la Fundación Barrié, Cáritas ha podido atender a 1.424 menores de 1.183 familias gallegas

14 mar 2017 . Actualizado a las 08:43 h.

«Todos podemos pensar que el indicador mayor para que una familia esté en pobreza es el desempleo, evidentemente esa familia está en riesgo de pobreza. Pero fíjense en algo que es tremendo para una sociedad: El mayor riesgo de ser una familia en pobreza es tener hijos, es decir, hace años, mucho años, tener hijos era casi un indicador de poder producir más; hoy en esa tasa del 28 % un hogar de familia numerosa está en un 45 % del riesgo de exclusión y pobreza». Esto decía ayer en A Coruña el secretario general de Cáritas Española, Sebastián Mora. Lo hacía tras renovar, por tercer año consecutivo, el convenio de colaboración con la Fundación Barrié, cuyo presidente, José María Arias, recordaba que en los dos años anteriores esta iniciativa ha permitido atender, en colaboración con las Cáritas Diocesanas de Galicia a 1.424 menores de 1.183 familias.

Para Mora, «en España tener hijos es un riesgo de pobreza porque las políticas de familia cada vez van más a la cola». De ahí, «aparte de otros valores, que la demografía vaya como va», dijo, situando a Galicia en primera línea de este problema, junto con Castilla y León. Para Mora la solución está en la educación porque «8 de cada 10 padres que no completan la educación primaria tienen sus hijos que tampoco la completan. En esta aportó otro dato: el 41 % de los adolescentes afectados por la pobreza no acabaron la educación secundaria y sentenció: «Esta es una sociedad abocada a la pobreza si no se soluciona la educación».

El fracaso escolar en Galicia está en el 17 %, frente al 22 % en España, «son cifras extraordinariamente altas», aseguró José María Arias. Además, habló de «muy buenos resultados» del programa renovado con Cáritas y que se centra en dos líneas básicas: apoyo económico para libros, comedor, psicólogo «o elementos tan sencillos como un audífono o unas gafas para que vean en clase», y apoyo «al fortalecimiento familiar, que los padres se puedan formar».