«Tienes que ir vacío y rellenarte allí»

Elisa Álvarez González
E. Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

cedida

Las becas Amancio Ortega llevan a 80 jóvenes gallegos al extranjero el próximo curso

13 mar 2017 . Actualizado a las 10:38 h.

Han demostrado su nivel académico y su conocimiento del inglés. Pero no solo eso. Los ochenta estudiantes gallegos de cuarto de la ESO que el próximo curso harán primero de bachillerato en Estados Unidos y Canadá con el programa de becas de la Fundación Amancio Ortega quieren vivir una experiencia inolvidable, conocer otra cultura, adaptarse y ganar en independencia. Y lo tienen muy claro. Lo explica Fernando Miranda, de Boiro: «Hay que ir sin ningún estereotipo, tienes que ir vacío y rellenarte allí literalmente. Tanto te puede tocar en una ciudad grande como en un pueblo, o en mitad de la nada», cuenta.

Como él, otros 79 alumnos gallegos participan este fin de semana en una convivencia repleta de talleres y actividades para reforzar habilidades sociales y conocer los sistemas educativos de los países de acogida. Todos saben que un curso académico en otro continente les cambiará la vida. «Lo que más ilusión me hace es estar en Estados Unidos porque siempre fue mi sueño, conocer a gente nueva, otra cultura, madurar y crecer como persona, ser más independiente, aprender a ayudar más en casa...», cuenta Laura Martínez, de A Coruña. Ayane Ahmed, de Vigo, comparte esta sensación: «Debes aprender a resolver los problemas por ti mismo porque aunque tu familia de acogida sea buena y cariñosa, tienes que aprender a convivir con ellos y adaptarte», explica.

Jorge Noya, de Ordes; Claudia Fernández, de Padrón; y Celia Arias, de Teo; coinciden con sus compañeros. «Vamos a ser más maduros y a tener la mente mucho más abierta», apunta Celia; «Supongo que también podrás conocerte mejor a ti mismo, no juzgar a nadie por nada», añade Jorge.

Menos este último, que tuvo claro que su personalidad va más con el carácter de los canadienses, por lo que irá a Ontario, los otros cinco viajarán a Estados Unidos, aunque no tienen ni idea de a dónde. Eso sí, tienen claro en qué estado no se quedarían si pudiesen elegir: Texas, «demasiado rancho», apunta Celia. A Claudia le gustaría Georgia o Virginia y aunque Alaska es otro de los estados que a la mayoría no les atrae, tanto a esta joven de Padrón como a Ayane no les importaría pasar allí un curso académico. «Creo que hay paisajes impresionantes que desde luego no vas a ver en España», dice Ayane. Los ochenta estudiantes gallegos formarán parte del medio millar de alumnos de toda España que se irán a Canadá y Estados Unidos. Allí recibirán formación de primero de bachillerato para volver y terminar aquí sus estudios. Saben que los primeros días serán difíciles. No podrán venir en todo el curso, ni recibir la visita de sus familiares, pero nada les asusta. «A lo mejor después no queremos volver», cuenta Laura.

Pese a sus 16 años, estos chicos tienen muy claro cómo quieren encarar su futuro. La mayoría ya han decidido qué carrera estudiarán cuando finalicen en Galicia segundo de bachillerato: Celia, Ayane y Laura se decantarán por Medicina, e incluso ya piensan en la especialidad que elegirán; Jorge por Periodismo; y Fernando por Derecho. Claudia aún tiene que pensárselo algo más, pero la experiencia del próximo año les ayudará a todos. Los cuarenta alumnos que irán a Estados Unidos solo quieren evitar un estado, Texas.

Más de ochocientos estudiantes se presentaron a estas ayudas en Galicia

El programa de becas de la Fundación Amancio Ortega está dirigido a estudiantes de cuarto de la ESO de centros educativos de toda España. Cada año se ofertan medio millar de becas en Estados Unidos y Canadá, la mitad en cada país, y de ellas ochenta se dirigen a los alumnos gallegos. La ayuda cubre el cien por cien del coste de la estancia, incluido el viaje y un servicio de apoyo y orientación desde que los estudiantes son seleccionados hasta que regresan a España. Una de las curiosidades de este programa es que no se permite que los alumnos vengan de visita, ni que vayan sus familiares, para que la inmersión sea más completa. Allí, los jóvenes residen con una familia anfitriona y asisten a clases del grado 11, que es el equivalente a primero de bachillerato. No solo perfeccionan su inglés y se integran en un sistema educativo como son los de Canadá y Estados Unidos, sino que aprenden a adaptarse a entornos nuevos y refuerzan habilidades sociales.

Requisitos

Para participar se exige una nota media superior al 7 y al menos un 8 en inglés en tercero de la ESO. También se tiene en cuenta el nivel de renta familiar y una prueba escrita de inglés. En la última fase se realiza un ejercicio oral y una entrevista personal. En la pasada edición se presentaron más de nueve mil estudiantes, y más de 800 eran gallegos. Desde la fundación recuerdan que aunque en Galicia el número de aspirantes está más estabilizado porque las becas tienen tradición, en España el crecimiento es llamativo.