«Aquí me tratan bien y me quieren»

Joel Gómez SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

SANDRA ALONSO

Juan Carlos Castiñeiras, del colectivo de Down Compostela, se afianza con empleo fijo tras incorporarse a un puesto de trabajo con un programa de apoyo laboral

09 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

A Juan Carlos Castiñeiras Rico le cambió la vida en noviembre del 2014. Desde el Multiusos Fontes do Sar, el gran complejo deportivo de Santiago, con más de cien trabajadores y 11.000 abonados, le habían propuesto a Down Compostela contratar a dos personas de su colectivo para tareas de mantenimiento y limpieza. Los eligieron a él y a su colega Adrián Cutrín. Ambos se mantienen; y han pasado a ser fijos, tras seguir con éxito un programa de empleo con apoyo. «Es la primera vez que tengo un trabajo así. Me trae mi padre, porque le coincide bien. Empiezo a las diez y estoy hasta las dos; me da igual el horario, pero prefiero por la mañana. Estoy muy contento, porque veo que aquí me tratan bien y me quieren», dice Juan Carlos. Al finalizar, también acude a recogerlo su padre habitualmente. Otras veces regresa en autobús.

Su trabajo se desarrolla en los vestuarios masculinos y en las salas de musculación y de cardiovascular. Le costó arrancar, porque el Multiusos tiene 13 salas diferentes, además de oficinas, pistas polideportivas y otros espacios para prensa y polivalentes: «Los conceptos espaciales y temporales son complicados para personas con Down. Pero tuvo muy buena acogida, pues le facilitaron conocer todas las instalaciones y lo que hacían sus compañeros, eso le permitió adecuarse mejor», explica Blanca Taboada, técnica de empleo de Down Compostela. Al principio, a veces se perdía, pero ahora, «es como mi segunda casa. Tengo amigos nuevos. Me gusta el trabajo que hago y además vengo a hacer deporte y a ver al Obradoiro», manifiesta Juan Carlos.

Él y Adrián tuvieron el apoyo desde el principio de un preparador laboral: «Se les enseñó a estructurar las tareas, y mediaron con los encargados directos y compañeros. Al principio, el apoyo era a tiempo completo, y poco a poco se les fue retirando. Ahora se hace un seguimiento para comprobar que no tengan dificultades», indica Blanca.

En lo que más se insiste, según esta técnica, es en que «cumplan bien las tareas que se les asignan; y cuando las tienen aprendidas, que rindan más y las hagan más rápido. Les cuesta más adquirir la rutina de trabajo que mantenerla después y resolver dificultades», agrega Blanca. Destaca que «todo el mundo está pendiente de él. Pero es puntual y responsable, nunca se va antes de tiempo».

En el Multiusos es muy apreciado, por la plantilla y por los usuarios. «Todos me saludan», dice Juan Carlos, que tiene las tareas estructuradas para toda la mañana.

Santiago López Cuadrado, gerente del Multiusos, sostiene que «Juan Carlos y Adrián son dos trabajadores más. Son responsables y se esfuerzan por integrarse; no hay quejas de la seriedad y responsabilidad que demuestran, y son un personal muy importante». 

Vida independiente

Las tareas de Juan Carlos son varias. «Repone jabón, prepara aseos y duchas, realiza recados internos, mueve material, recoge documentos, hace labores de comunicación interna, y otras. Necesitábamos reforzar esa área de trabajo y tuvimos la iniciativa de contactar con Down Compostela, pues pensamos que el personal que forman se adaptaba a lo que precisábamos. Creo que cualquier empresa podría adoptar acciones semejantes», enfatiza Santiago López.

En Down Compostela promueven el empleo con apoyo desde principios de este siglo. «Dá bo resultado e facilitou que teñamos varias persoas traballando. A presenza do preparador laboral fai que o empresario perda o medo a contratar; o preparador evita que perda o tempo na formación para o posto e iso axuda moito», dice su presidente, Juan Martínez.

La experiencia de este programa «é moi satisfactoria. O noso obxectivo é que as persoas con Down teñan vida independente. Para iso é básico ter traballo, que garanta a independencia económica. Porque, ¿que independencia tes se che teñen que pagar a comida, a vivenda e a roupa?», señala. En el 2016, el 79 % de los que se acogieron al empleo con apoyo de esta entidad tuvieron un contrato laboral, y el 47 % de los que obtuvieron un puesto por este método tienen un contrato indefinido.