Las novatadas de la hermandad Sigma Pi: beber leche hasta vomitar y pasar horas en una jaula

Adriana Rey NUEVA YORK / E. LA VOZ

SOCIEDAD

Hofstra Chronicle

Una asociación universitaria de Hempstead, Nueva York, acusada de cometer abusos

11 dic 2016 . Actualizado a las 09:23 h.

Entrar en una hermandad es un sueño para millones de jóvenes estadounidenses. Bajo el nombre de letras del alfabeto griego, estas organizaciones se presentan como lugares donde el compañerismo y la lealtad entre sus miembros son la base de una larga relación que se prolongará más allá de la carrera universitaria. En muchas ocasiones es así. Pero en otras no. Varias hermandades han sobrepasado los límites de la ley con brutales novatadas. El último capítulo de esta lista de abusos ha tenido lugar en la hermandad Sigma Pi, en Hempstead, Nueva York y ha sido desvelado por el diario The Hofstra Chronicle, un periódico que lleva el nombre de su universidad y que está editado por los alumnos. Allí, y bajo el término «prueba de acceso», se escondían decenas de rituales repletos de vejaciones, a los cuales debían de someterse los aspirantes a entrar en dicha hermandad.

Las imágenes publicadas corresponden al 2014 y 2015. Hablan por sí solas: estudiantes en el suelo cubiertos de harina, mientras otros, arrodillados y atados, cumplen con el rito conocido como Hell Night (noche infernal), soportando cómo los más veteranos llenan su cuerpo de salsa picante. Syen Ali John Mehdi, fue una de las víctimas. Todavía con miedo, describe más abusos: «El aspirante de menor estatura era metido en una pequeña jaula por un tiempo indefinido. Si no respondía bien a las preguntas sobre la hermandad, podía pasar horas dentro». Mehdi denunció los hechos con un vídeo enviado a las autoridades universitarias. En él se puede ver a estudiantes forzados a beber leche hasta acabar vomitando. «¡Sigue bebiendo!», se escucha decir con aparente autoridad a uno de los veteranos. En una de las paredes hay una esvástica.

El caso de Sigma Pi está en manos de la policía y su crueldad recuerda a la de otros denunciados en todo el país. Justin Stuart aún tiene pesadillas tras los rituales de iniciación de la Hermandad Sigma Alpha Epsilon, en la universidad de Salisbury, Maryland. «Eran como una tortura», dijo cuando el escándalo salió a la luz, en el 2013.

Fundada en 1856, Sigma Alpha Epsilon era una de las hermandades más prestigiosas de EE.UU. Pero su historia habla de rituales que han costado la vida a 9 jóvenes estadounidenses, según Bloomberg.