Antón Pazos: «Los archivos del Vaticano son imprescindibles para entender la historia por su carácter universal»

Raúl Romar García
R. Romar REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Pazos acaba de ser elegido por el papa como miembro del Pontificio Comité de Ciencias Históricas

15 nov 2016 . Actualizado a las 09:47 h.

El historiador Antón Pazos (A Coruña, 1961, subdirector del Instituto de Estudios Gallegos Padre Sarmiento (CSIC) acaba de convertirse, después de su nombramiento por parte del papa, en el primer gallego en formar parte del Pontificio Comité de Ciencias Históricas, un organismo de la Santa Sede instituido por Pío XII en 1954 que tiene entre sus cometidos promover la investigación histórica y asesorar a los organismos vaticanos en cuestiones relacionadas con el patrimonio histórico. Solo otros tres españoles formaron parte de este equipo, constituido por 26 personas, de los que dos ya han fallecido. Paz asesorará sobre la apertura de los documentos que aún están clasificados en el Archivo Secreto del Vaticano, aunque la última palabra la tiene el pontífice.

-¿Se esperaba ser nombrado por el papa para integrar el comité?

-No, la verdad es que no me lo esperaba. Fue una sorpresa, aunque, como presidente de la Comisión Internacional de Historia del Cristianismo, he colaborado con ellos en varias ocasiones. La última en un coloquio sobre la Primera Guerra Mundial.

-¿Cuál será su aportación?

-Depende de la especialidad de cada uno, y yo soy especialista en Historia Contemporánea. He trabajado durante muchos años en los archivos vaticanos y me gustaría ayudar en algo a que funcionen mejor, aunque funcionan extremadamente bien.

-El Archivo Secreto del Vaticano está abierto hasta el inicio de la Primera Guerra Mundial. ¿Habrá sorpresas cuándo se abra el período conflictivo de Pío XII?

-El archivo se abre por pontificados y ahora solo llega hasta 1939. Nosotros podemos asesorar, pero quién tiene que decidir cuándo se abre es el papa. Pero sobre este período no se esperan sorpresas, porque se ha publicado ya mucho. Se hizo una especie de cata, con diez volúmenes de documentos, que fueron seleccionados por un grupo de expertos que escogieron los más significativos. Hay que suponer que lo que ha salido es lo más llamativo, por lo que no creo que cuando se abran todos nos vayamos a encontrar con algo especialmente llamativo.

-¿Y después de esa época?

-No sabemos si habrá sorpresas o no. Puede haber sorpresas, pero no lo sabremos hasta que se abran. Solo hay especulaciones, pero no hay datos.

-¿Es tan complicado abrirlos?

-Lo es porque son millones de documentos, y todos ellos distintos, porque aparecen todo tipo de cosas, desde cartas de embajadores hasta el menú del banquete que se dio con motivo de la coronación del rey de Inglaterra. Y muchos de ellos, la mayoría, son manuscritos. Por eso es imprescindible una herramienta de búsqueda y clasificación de los documentos. Si no identificas los legajos, a los historiadores no nos sirve para nada.

-¿Los archivos vaticanos son imprescindibles para entender la historia?

-Sí, son imprescindibles para entender la historia, sobre todo porque son universales. Tienen un carácter de universalidad que no tiene ninguna otra institución del mundo.