China lanza el primer satélite cuántico para intentar la «teletransportación»

La Voz PEKÍN / AFP

SOCIEDAD

STR | AFP

El sistema hará inviolables las comunicaciones, y ese es el objetivo a corto plazo

17 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

China efectuó ayer el primer lanzamiento mundial de un satélite de comunicación cuántica, un avance tecnológico con dos objetivos: a corto plazo, construir un sistema inviolable de comunicaciones codificadas, a prueba de hackers; y a largo, conseguir la teletransportación de objetos, aunque van a empezar con algo sencillo, transmitiendo fotones a estaciones de control espacial en suelo chino situadas a 1.000 kilómetros una de otra.

El lanzamiento del satélite en el desierto de Gobi llega cuando Estados Unidos, Japón y otras naciones desean también imponerse en la tecnología cuántica, en pleno auge. China invirtió ingentes recursos financieros en este maratón tecnológico, una de las numerosas inversiones de Pekín en la investigación científica puntera, que abarca desde la explotación minera de los asteroides a las manipulaciones genéticas.

El objetivo del satélite, bautizado Micio en honor a un filósofo chino de siglo V a. C., será demostrar el interés de la tecnología cuántica en las comunicaciones de larga distancia. 

Seguridad total

A diferencia de los métodos clásicos de transmisión segura, el sistema utiliza fotones (una partícula elemental del campo electromagnético) para enviar las claves de encriptado necesarias para decodificar la información. Los datos contenidos en estos fotones son imposibles de interceptar, ya que cualquier intento de espionaje provocaría su autodestrucción.

Aunque los científicos han demostrado la eficacia de la técnica para transmitir mensajes en distancias relativamente cortas, los obstáculos técnicos sitúan fuera del alcance hasta el momento las comunicaciones a larga distancia. El récord actual se sitúa entorno a los 300 kilómetros en tierra, según un artículo de la revista científica Nature. El satélite intentará enviar datos cifrados entre Pekín y Urumqi, la capital de la región de Xinjiang situada a casi 2.500 kilómetros de distancia.

La operación necesitará que el satélite esté orientado de una manera extremadamente precisa hacia las estaciones receptoras en tierra, según la agencia Xinhua: «Será como lanzar una moneda desde un avión que vuela a 100 kilómetros de altura y esperar que caiga exactamente en la ranura de un cerdito hucha en rotación», explicó a la agencia el responsable del proyecto, Wang Jianyu. Desarrollar esta nueva tecnología es un objetivo crucial para Pekín, que la incluyó en su nuevo plan quinquenal publicado en marzo.

La ciberseguridad ha sido un foco importante en los últimos años para el país asiático, que ha impulsado normas destinadas a limitar la tecnología importada de Estados Unidos, a raíz de las revelaciones de vigilancia generalizada de este país que desveló Edward Snowden.