Un mineral inesperado en Marte replantea su historia volcánica

R. R. García

SOCIEDAD

NASA

Es una forma de sílice, un material que también puede ser esencial para que existan formas de vida en el planeta

24 jun 2016 . Actualizado a las 01:11 h.

¿Tridimita en Marte? Imposible. Esta podría ser la primera reacción de los geólogos planetarios ante una pregunta similar, pero la exploración del robot Curiosity de la NASA en el cráter Gale ha demostrado, en un regalo inesperado para la ciencia, que no solo es posible, sino que este material existe ahora mismo, y en cantidades significativas, sobre su superficie. El hallazgo, confirmado por el análisis de los datos del instrumento de difracción de rayos X del propio rover, no es uno más, ya que hará reconsiderar la historia volcánica de Marte. El descubrimiento sugiere que el planeta rojo tuvo alguna vez volcanes explosivos que dieron lugar a la presencia de este mineral silícico.

«En la Tierra, la tridimita se forma a altas temperaturas en un proceso explosivo denominado vulcanismo silícico. El volcán de Santa Helena (Washington) y el de Satsuma-Iwojima (Japón) son ejemplos de este tipo de volcanes», explica Richard Morris, uno de los autores principales del trabajo, publicado en la revista científica Pnas. «El hallazgo, completamente inesperado, plantea la pregunta de si Marte experimentó una historia volcánica mucho más violenta y explosiva de lo que se pensaba durante su evolución temprana», añadió.

La tridimita es una de las 22 formas de cristalizar que tiene el cuarzo, pero hasta ahora se creía que las rocas volcánicas que forman la mayor parte del planeta tienen composición basáltica, «lo que quiere decir que no tienen suficiente silicio para que se forme cuarzo», apunta Juan Ramón Vidal Romaní, director del Instituto Geológico Isidro Parga Pondal de la Universidade da Coruña y colaborador de la NASA en el estudio de cuevas terrestres que simulan las condiciones de Marte.

Vida bacteriana

Para este geólogo, el hallazgo presenta una dimensión aún más importante, puesto que abre la posibilidad de que «en las cuevas marcianas haya habido vida bacteriana desde hace millones de años, e incluso que pueda haberla ahora».

¿Por qué? «Porque el silicio es esencial para la vida, más importante que el carbono aún, y es lo que estamos comprobando en nuestros estudios de colonias bacterianas en las cuevas de rocas magmáticas en la Tierra», responde Vidal Romaní.

El catedrático de Geología entiende que la posibilidad de encontrar microorganismos en la superficie del planeta es prácticamente inexistente, porque «como no hay capa de ozono en su atmósfera cualquier forma de vida sería esterilizada». El agua también desapareció de su superficie hace millones de años, por lo que «el único lugar en donde puede haber restos de organismos es en el interior de las cuevas, porque allí hay agua, o congelada o en estado de vapor».