«El estereotipo del informático friki nos ha hecho perder mucho talento»

Raúl Romar García
r. romar REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

CESAR QUIAN

Rodríguez asegura que la profesión vive un buen momento, con pleno empleo y en el que aún falta más personal

28 may 2019 . Actualizado a las 17:46 h.

Es psicóloga y hoy en día podría haber tenido una prometedora carrera como profesora de educación especial. Pero mientras preparaba las oposiciones en Galicia, tras regresar con su familia de Madrid, decidió estudiar FP de Informática. Ya nada volvió a ser igual para Nieves Rodríguez Brisaboa. Catedrática del área de Lenguajes y Sistemas Informáticos y directora del Laboratorio de Bases de Datos en la Universidade da Coruña (UDC), hoy es una de las referentes internacionales en recuperación de información, indexación de textos, bibliotecas digitales y sistemas de información geográfica, lo que la ha convertido también en uno de los grandes apoyos de las empresas que trabajan en estos campos. Son méritos que la han llevado a ser reconocida esta semana con el Premio Ada Byron del Colegio Oficial de Ingenieros Informáticos de Galicia, con el que también se hace visible el trabajo de la mujer en el campo de la informática.

-¿Por qué hay tan pocas mujeres informáticas?

-Hay una mezcla de razones. Pero el problema no es solo que haya pocas chicas, sino que, en general, ha bajado el interés de los jóvenes por la informática. Y eso que es una carrera en la que hay pleno empleo.

-¿Por qué?

-La razón es que la carrera se ha asociado con un perfil social muy friki, de personas solas que trabajan en un sótano con cinco pantallas de ordenador. El estereotipo social del informático es muy poco atractivo y la gente prefiere hacer Telecomunicaciones porque le parece que tiene más glamur.

-En esta imagen las chicas no se sienten identificadas.

-No. Si para los chicos en general es un perfil con el que no se pueden identificar, en el caso de las chicas es para salir corriendo. El estereotipo del informático friki nos ha hecho perder una gran cantidad de talento.

-¿Y este estereotipo tiene algo de cierto?

-Es completamente falso. La realidad es que el 90 % del trabajo de los informáticos se hace en equipo y es necesaria una gran interconectividad con empresas y usuarios, porque nuestro trabajo consiste en solucionar los problemas de los demás.

-¿A qué se debe, entonces?

-Los personajes de las películas y las series no ayudan, porque presentan a los informáticos como bichos raros y frikis. Por lo general son hombres, pero si aparece alguna mujer es más bicho raro aún.

-Lo extraño, sin embargo, es que se trata de una carrera en la que apenas hay paro.

-En informática hay pleno empleo, no hay profesionales en paro. Incluso se necesitaría un 10 % más de licenciados para cubrir las necesidades. Las empresas buscan informáticos y no los encuentran, por lo que tienen que quitárselos entre ellas. Yo, desde luego, animaría a los jóvenes a estudiar Informática porque es una profesión con enorme futuro y una garantía total de empleo. Y también animaría a las chicas a hacerlo, porque no hay nada en la profesión que las impida ser menos capaces que los hombres. Ahora mismo, además, la nota de corte para entrar en la facultad de A Coruña es más baja que hace 10 ó 15 años.

-Usted fue profesora de educación especial y es psicóloga. ¿Cómo se ha convertido en un referente de la informática?

-Yo estudié Psicología en Madrid y trabajé allí de profesora de educación infantil. Pero mi familia se vino para A Coruña y yo me vine luego con ellos. Como no tenía trabajo, me presenté a las oposiciones de la Xunta, pero alguien me dijo que, por si acaso, buscara algo más. Me recomendaron matricularme en FP de informática porque decían que tenía mucho futuro.

-Usted aprobó la oposición, lo que le garantizaba un trabajo seguro. Sin embargo, siguió estudiando informática.

-Sí. Lo que pasó es que me encantó la informática y que sentí que valía para ello. Luego se creó la Facultad de Informática, me matriculé y aquí estoy.

-Usted ahora dirige un grupo catalogado de excelencia por la Xunta. ¿Notaron los recortes?

-El mayor problema que tuvimos en los grupos fue la desaparición de la posibilidad de promocionar, de acceder a una plaza o de tener una estabilidad profesional. Pero mucho peor que esto fue ver cómo la gente estabas formando en investigación se tenía que ir al extranjero porque aquí no podía seguir. Es lo que le ha pasado a la universidad española, en la que se ha perdido un gran cantidad de talento que se ha formado aquí, con dinero español, y que ahora están siendo productivos en otros países que no han invertido nada en ellos, en formarlos. Creo que este ha sido el mayor problema de la crisis.