La liberalización y el inicio del colegio restaron aglomeraciones a las rebajas

M. P. REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Ruth Sousa

Descuentos iniciales de hasta el 80 % auguran una campaña con aumento del gasto

08 ene 2016 . Actualizado a las 08:14 h.

Las rebajas no fueron madrugadoras ayer en Galicia, donde al mal tiempo se le ha sumado el inicio de las clases en los institutos -además de la liberalización del período de saldos, que lleva cuatro eneros aplicándose-, por lo que en vez de la explosión habitual de la primera hora, la mañana se desarrolló con relativa calma y el ambiente comenzó a caldearse con las horas y especialmente por la tarde. Las tiendas, por su parte, han optado por echar toda la carne en el asador, y ofrecieron un fuerte arranque de descuentos: lo normal era encontrar rebajas del 50 %, que llegaban hasta el 80 % en algunos productos o tiendas.

Esta apuesta por los porcentajes altos, sumado a una apreciación de mejora de la situación económica, hace que el comercio espere un cierre de temporada bueno, un 5 % más que durante el enero-marzo pasado, que en el caso de la Federación Gallega de Comercio es incluso algo mayor, del 6 o 7 %, según su propio presidente, José María Seijas.

En dinero, supondrá que cada gallego se dejará en las tiendas hasta marzo de 70 a 85 euros aprovechando los ajustes en las etiquetas. En muchos casos las rebajas se han vivido desde casa porque si bien ayer comenzaban en El Corte Inglés, Mango o el grupo Inditex, este había ofrecido los descuentos por Internet desde el mismísimo día de Reyes por la noche, lo que supuso para muchos un regalo de los Magos.

Y con las rebajas, llegan las advertencias. Especialmente activa estaba ayer la cuenta de Twitter de la Policía Nacional (@policia), que con su ya característico estilo desenfadado alertaba: «¿Te vas de #rebajas? ¡Suertudo! Pero, en aglomeraciones, no pierdas de vista tus pertenencias y evita que te amarguen el #shopping» o «En #rebajas saca la tarjeta loca y compra lo que más te guste pero OJO, no la pierdas de vista y comprueba el cargo antes de introducir el PIN».

También lanzaban ayer sus habituales advertencias las organizaciones de consumidores. La OCU recordaba que «aunque en las rebajas se recorten los precios, tus derechos siguen siendo los mismos». Como complemento, proponía -para evitar disgustos por compras innecesarias- salir de casa con una lista de lo que se necesita y el dinero disponible para estas fechas. Por supuesto, recalcaba la importancia de conservar el tique de compra en previsión de reclamación.

Facua, por su parte, incidía que no es lo mismo el período de liquidación que el de rebajas e indicaba que, en caso de reclamar ante cualquier producto o insatisfacción en el servicio, los comercios deben responder en el plazo máximo de diez días.

De vuelos a peluquerías

Las rebajas no solo son para las tiendas de ropa y calzado. Su eficacia hace que todo tipo de sectores se apunten a unos descuentos estos días: Vueling ofrecía (ayer y hoy) viajes 2x1, pero la lista es casi infinita; hay descuentos en tiendas de semillas por Internet, peluquerías, seguros, deportes, perfumerías, decoración, concesionarios de coches, librerías, depilación láser, hoteles, programas para perder peso, fotocopias, cursos de pádel o de cine, cafeterías, ópticas, madejas de lana e hilo...

Ecoserveis, WWF y Ecodes lanzan la camaña #salecaro, sobre el consumo sostenible

La compra de productos de cierta entidad llevados por los descuentos no debe hacer perder a los consumidores el análisis de la adquisición que están haciendo. Para ayudarles a tomar la mejor decisión, las organizaciones Ecoserveis, WWF y Ecodes lanzaron la campaña #salecaro, con la que pretenden recordar la importancia que tiene el consumo responsable y sostenible para fomentar la economía circular, a la vez que denunciaban que uno de cada tres de estos productos no tiene la etiqueta de eficiencia energética visible.

Las oenegés inciden en que antes de comprar nuevos equipos eléctricos y electrónicos se analice si realmente se necesitan y, de ser así, que se tenga en cuenta una serie de consejos: no siempre los aparatos más grandes son los mejores, y así, si uno vive solo su lavavajillas no tiene por qué ser familiar, por ejemplo; o que la eficiencia energética a veces supone un mayor desembolso inicial pero acaba saliendo a cuenta por la larga vida de los electrodomésticos y la menor contaminación que producen, y en ese sentido la etiqueta más ambiciosa es la A+++. Finalmente, las entidades que auspician #salecaro animan a que se piense en el impacto de lo que se adquiere, ya que la fabricación de cada aparato requiere el consumo de «importantes» cantidades de materias primas, como por ejemplo metales (cobre, oro, mercurio, plomo, acero...) y el consumo de energía; también suponen la generación de residuos altamente tóxicos y nocivos, para el planeta y la salud humana.

Un día en las tiendas gallegas

MARCOS MÍGUEZ

«La pena es que una sudadera que compré hace dos días la veo ahora muy rebajada». Diego González, 21 años y estudiante de Derecho en la UDC acudió por la tarde a las tiendas: «Me compré una camisa, una camiseta y unas zapatillas de la misma marca. La pena es que la sudadera que llevo la compré hace dos días y ahora está muy rebajada. Suelo venir el primer día de rebajas, tenía pensado incluso ir por la mañana pero tenía que estudiar porque el lunes tengo un examen».

PEPA LOSADA

«A tope, con cambios en regalos y rebajas, pero se compró mucho en temporada». Mónica Albo, de Kody, arrancó las rebajas «a tope, con cambios en regalos y rebajas», con descuentos entre el 30 y el 70 %. La propietaria de esta tienda de moda, que ocupa un edificio restaurado en el casco histórico de Viveiro, asegura que «la gente compró mucho antes», y que vende ya prendas para la nueva temporada. «Son personas caprichosas, que no quieren saber ya nada del invierno».

Sandra Alonso

«Estuve antes de fin de año, hoy me ahorré 20 euros y volveré dentro de unos días». Celia Lozano, de Monforte, acudió ayer a una tienda de Inditex en As Cancelas (Santiago). Estudiante, pasó por el mismo comercio antes de fin de año, se llevó alguna idea y por la tarde ejecutó la compra, dos camisas «que me hacían falta». Gastó 40 euros, se ahorró 20 y lo tiene claro: «Volveré dentro de unos días», aunque es consciente de las dificultades que tendrá para encontrar variedad en tallas. 

CARMELA QUEIJEIRO

«No me puedo   quejar, cuando abrí la puerta por la mañana ya tenía gente». Magdalena Vila es la titular de una pequeña tienda de moda femenina en Ribeira y ayer por la mañana, pese a que el viento y la lluvia no animaban en absoluto a ir de compras, se mostraba contenta por cómo estaba yendo la jornada: «Las rebajas acaban de empezar pero no me puedo quejar, cuando abrí la puerta por la mañana ya tenía gente, clientes que ya tenían el ojo echado a alguna prenda».

José Manuel Casal

«Procuro vir os primeiros días, hai máis onde escoller, logo esgótanse tallas». A las seis de la tarde de ayer, el ribadense Xosé Carlos Rodríguez (42 años) había recorrido ya varias tiendas de Carballo, donde vive hace ocho años. Aprovechó el primer día de rebajas (las vio buenas) y que la lluvia restó afluencia a los comercios, por lo que podía andar cómodo: «Habitualmente aproveito as rebaixas e procuro vir os primeiros días, hai máis onde escoller, logo esgótanse tallas».