Investigan la muerte de un menor transexual en Barcelona

EFE

SOCIEDAD

La familia denuncia que el joven, de 17 años, se quitó la vida porque era víctima de acoso escolar

28 dic 2015 . Actualizado a las 14:45 h.

El Defensor del Pueblo de Cataluña (Síndic de Greuges) ha abierto una actuación de oficio para saber qué hizo la Generalitat con respecto al presunto caso de acoso escolar que condujo a un joven transexual a quitarse la vida. La institución ha solicitado información a los departamentos de Enseñanza, Salud y Bienestar Social y Familia para conocer qué medidas tomaron a raíz de la situación padecida por el menor y denunciada por su familia.

La Ley 11/2014, aprobada el pasado año en el Parlament de Cataluña, de garantía de los derechos de lesbianas, gais, bisexuales, trangéneros e intersexuales y para erradicar la homofobia, la bifobia y la transfobia, otorga al Síndic la función relativa a la defensa de derechos y libertades en materia de no-discriminación de las personas LGBTI. 

La asociación Chrysallis, que agrupa a familias de menores transexuales, informó el pasado viernes del suicidio del joven Alan. El menor fue uno de los primeros en Cataluña a los que, a principios de mes, un juez autorizó a cambiar su nombre en el DNI y en los documentos oficiales, tras un proceso en el que contó con el apoyo de su familia. Fue la madre del menor la que informó del suceso a la asociación en un comunicado: «Siento en el alma tener que dar esta terrible y triste noticia. Nuestro hijo Alan se quitó ayer su corta vida de 17 años. No pudo con la presión de la sociedad y nos ha dejado para siempre. Muchas gracias por todo vuestro apoyo recibido».

El Síndic lamenta «profundamente» el suicidio del joven y «quiere evitar que situaciones como esta se vuelvan a producir», indica a través de una nota, en la que hace llegar a la familia afectada su pésame y su compromiso de que se actuará con celeridad en el análisis de los hechos para evitar su repetición.

A raíz de una queja recibida anteriormente, el Síndic ya estudió la situación de los adolescentes LGTBI en las escuelas e institutos de Cataluña y sugirió que se promovieran actuaciones específicas para abordar estas situaciones. En concreto, recomendó que se establecieran mecanismos de protocolo de detección y seguimiento, que se establecieran programas de formación específica para acoso homofóbico y transfóbico dirigidos al profesorado, así como programas de intervención y de sensibilización hacia la problemática que padecen los alumnos LGTBI.

«Entre todos lo mataron»

Unas 150 personas, según la Guardia Urbana, se concentraron este domingo en la plaza Sant Jaume de Barcelona contra el acoso escola a raíz del suicidio de Alan. Durante la concentración, que también se ha convocado en otras ciudades españolas y que ha contado con el apoyo del Observatorio contra la Homofobia y el Frente de Liberación Gay de Cataluña (FAGC), el presidente de Chrysallis en Cataluña, David Tello, ha leído un manifiesto de repulsa por esta muerte, que ha calificado como «un asesinato social» y un suicidio inducido por el bulling.

Ha recordado que esta era la primera Navidad que Alan iba a celebrar con su nueva identidad. «Ha resultado trágicamente ser la última». Ha remarcado que la transfobia en el ámbito escolar ha podido con Alan, que sufrió mucho rechazo a lo largo de su vida, y que «lo ocurrido no es responsabilidad de una sola persona, sino que cada día, durante años, alguien se ocupó de que supiera que su diversidad no era aceptada». «Entre todos lo mataron», ha recalcado.

También se ha denunciado que las personas transexuales y sus familias sufren continuamente actos de microviolencia, tanto social como institucional, que se acumulan y se suman a los obstáculos que supone vivir esta situación, y que como le pasó a Alan se convierten en una carga insoportable