Arranca la cumbre del clima en París con un dramático llamamiento a preservar el planeta

Agencias PARÍS

SOCIEDAD

El presidente de Francia, François Hollande, ha asegurado que la lucha contra el terrorismo y contra el calentamiento global están «estrechamente relacionadas»

30 nov 2015 . Actualizado a las 14:34 h.

La conferencia sobre el clima COP21 se abrió este lunes en París en presencia de más de 150 jefes de Estado y de gobierno con un dramático llamado a negociar un acuerdo global contra el cambio climático, capaz de preservar la vida de las generaciones futuras en el planeta. Durante dos semanas 196 países tratarán de llegar a un acuerdo con el que limitar el aumento de la temperatura del planeta al final de siglo a 2 grados centígrados.

Esta mañana durante la inauguración, el presidente de Francia, François Hollande, ha asegurado que la lucha contra el terrorismo y contra el calentamiento global están «estrechamente relacionadas». Además, ha añadido que para alcanzar ese objetivo se es necesario un acuerdo «universal, diferenciador y vinculante» en el que los países más ricos colaboren más que los países más pobres.

«Yo no puedo separar la lucha contra el terrorismo de la lucha contra el cambio climático», ha sentenciado el presidente francés, quince días después de los atentados yihadistas en París, que acabaron con la vida de 130 personas.

A su juicio estos son «dos grandes retos» que hay que enfrentar porque se debe dejar a las generaciones futuras más que un mundo libre de terror. «Tenemos que proteger también al planeta de las catástrofes», ha añadido. «La paz mundial está en juego en estas negociaciones», ha concluido.

Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, consideró hoy que si todos los países participantes en la cumbre del clima (COP21) de París deciden «actuar ahora, no será demasiado tarde para la próxima generación», y finalizó su intervención con un llamamiento: «Pongámonos a trabajar». 

«El futuro de las generaciones venideras»

 Mientras el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, afirmó hoy durante la apertura de la cumbre del clima de París que los delegados allí presentes tienen en sus manos «el futuro de las generaciones venideras».

«Estamos aquí para escribir el guión de un futuro mejor para el planeta, un nuevo futuro de esperanza, seguridad y dignidad para todos», señaló Ban, quien comenzó su intervención con una llamada a un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de los atentados terroristas en Francia.

El secretario general de Naciones Unidas dijo a los más de 150 líderes mundiales y miles de delegados de los países congregados en París: «Estamos en el mismo lugar con un objetivo común, tenemos el poder de cambiar las cosas, elijamos el camino del compromiso, la flexibilidad y el consenso».

Ban apeló a los líderes mundiales a «acelerar» la ambición de los compromisos climáticos presentados para el acuerdo global de cambio climático que se prevé aprobar en París con el fin de lograr que la temperatura del planeta no aumente más de 2 grados a finales de siglo (frente a los 2,7 grados que implicarían las contribuciones actuales).

«Nos dirigimos hacia un futuro bajo en emisiones y no hay vuelta atrás», subrayó.

Ban abogó por que de París salga un acuerdo «universal, ambicioso, creíble y a largo plazo» para descarbonizar la economía mundial, pero también un pacto «solidario con los más vulnerables y con compromisos de adaptación para los países en desarrollo».

Habló también de un acuerdo con compromisos revisables al alza cada cinco años, empezando en 2020, y «con flexibilidad para los países de capacidades limitadas».

«El futuro del planeta depende de ustedes, no nos podemos permitir la indecisión, estamos llamados a la transformación de nuestro modelo de desarrollo, la transición ya ha empezado pero necesitamos su ayuda y su visión para acelerarlo», apeló Ban a los líderes mundiales al final de su intervención.

El secretario general de Naciones Unidas concluyó recordando a los líderes mundiales que «la sociedad civil ha salido a la calle pidiendo el cambio», y diciéndoles que «tienen una responsabilidad moral con las generaciones presentes y futuras».

«Sean valientes y ambiciosos para hacer de este mundo un mundo mejor», concluyó.