El papa desata en Uganda la mayor ola de entusiasmo de su visita a África

Agencias KAMPALA

SOCIEDAD

GIUSEPPE CACACE / POOL | Efe

El pontífice rindió homenaje en Kampala a los mártires ejecutados a finales del siglo XIX por el rey Mwanga II

29 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El papa rindió ayer en Kampala homenaje a los mártires ejecutados a finales del siglo XIX por el rey de Uganda Mwanga II, quienes en su fe «buscaron el bien de todos, incluso del mismo rey que les condenó por su credo cristiano. Su respuesta -dijo- buscaba oponer el amor al odio».

El homenaje de Francisco comenzó con una visita al santuario anglicano de los mártires de Namugongo, en las afueras de Kampala, donde rezó de rodillas una oración por ellos. Después se trasladó al santuario de los mártires católicos, donde ofició un misa que concentró a cerca de 300.000 personas, el acto central de su visita a Uganda, el mayor auditorio que ha reunido desde que aterrizó el miércoles pasado en África.

Momentos de tensión

Los «héroes nacionales» también estuvieron presentes en el posterior encuentro con jóvenes que se celebró en el aeródromo de Kampala, donde hubo momentos de tensión por la contención con vallas de una masiva afluencia de fieles, unos 150.000, según el Vaticano. Allí, prescindiendo de su protocolario discurso, les animó a descartar la cultura consumista actual de «usar y tirar» que, como remarcó en la siguiente visita a un centro de caridad, induce a «despreciar a los niños no nacidos, a los jóvenes y a los ancianos».

Sus últimas palabras de recuerdo a los mártires sonaron en la catedral de Kampala: «no pierdan la memoria de esta semilla, para que así pueda seguir creciendo».

El rey Mwanga II ordenó ejecutar de manera salvaje a los 45 mártires de Uganda a finales del siglo XIX por defender su credo, pero logró un efecto contrario, ya que el cristianismo se expandió rápidamente en sus dominios.