La vacuna de la tosferina se dará a embarazadas o a niños de 6 años

M. Cheda / R. romar REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

LEON NEAL|LEON NEAL | AFP

Los problemas de abastecimiento del medicamento obligan a la Xunta a elegir

20 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

No hay vacunas de la tosferina para todos. O se inmuniza a las embarazadas para que confieran protección a sus bebés en los dos primeros meses de vida, momento en el que la prevención ya entra en el calendario oficial, o se administra la dosis de refuerzo a los niños de seis años. El problema de suministro global de la vacuna trivalente dTpa, la que previene contra la tosferina, la difteria y el tétanos, obliga a realizar una elección. Será la decisión que tomarán a principios de diciembre los expertos de la Comisión Galega de Enfermidades Inmunoprevenibles, un acuerdo que será el que adoptará la Consellería de Sanidade para planificar el calendario de vacunación, según avanzó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo.

Lo más probable, según la opinión de los expertos, es que Galicia se sume también a las otras siete comunidades que han optado ya por administrar la protección a las embarazadas, ya que se considera que el beneficio es mayor. La dosis de refuerzo a los niños se puede aplazar de los seis a los ocho años, sin que este retraso suponga, en principio, un mayor problema.

«Eu espero que nos primeiros días de decembro teñamos tomada unha decisión. E estamos estudando, efectivamente, elaborar unha proposta posible do uso de vacinas existentes en mulleres embarazadas en Galicia», explicó Feijoo al término del Consello da Xunta. El titular del Gobierno gallego admitió que «nos volvemos a encontrar outra vez con dificultades de abastecemento, pero creemos que podemos ofertar, se así o deciden os epidemiólogos, esa carteira de vacinas ás embarazadas».

La Xunta dispone en estos momentos de 10.000 dosis de la vacuna y a principios de año espera recibir entre 4.000 y 5.000 más, pero pueden no ser suficientes para todos si persiste, como parece, el problema de suministro. La prioridad son los más pequeños, que reciben dosis a los 2, 4, 6 y 18 meses, aunque en este caso tienen garantizada la cobertura sanitaria porque se les viene suministrando de forma mayoritaria la vacuna hexavalente, que además de contra la difteria, la tosferina y el tétanos previene contra la polio inactivada, la H. influenzae tipo B y la hepatitis B. La elección será entre los 23.000 niños a los que en teoría se les da la protección de refuerzo a los 6 años o entre las 20.000 mujeres que cada año quedan embarazadas en Galicia.

«Ou se lle da a vacina a uns ou a outros, porque ás dúas cohortes vai ser algo imposible», confirma el subdirector xeral de Información sobre Saúde e Epidemioloxía da Consellería de Sanidade.

«Preocupación»

Los expertos coinciden en que, pese a los tres bebés muertos en España por tosferina, no existe motivo para la alarma, ya que son las cifras habituales de cada año. En Galicia, la última muerte se registró en el 2013 y en el último decenio la media aproximada es de un óbito cada dos años.

Aun así, el presidente de la Xunta expresó ayer su preocupación. «Galicia -dijo- está entrando xa nun suposto de incremento, e polo tanto están activadas as preocupacións en relación con este asunto».

La Consejería de Sanidad de Murcia confirmó ayer la muerte en febrero de un niño por tosferina, con lo que sería el cuarto caso registrado en España. Pese a ello, el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, hizo una llamada a la tranquilidad y aseguró que estas cifras «entran dentro de lo previsible cada año», aunque lo que sí se ha observado es un notable aumento de los contagios. De hecho, entre el 2007 y el 2012 se contabilizó una media de 4,8 fallecimientos de niños al año por la tosferina. «No hay datos epidemiológicos -aseguró Alonso- que cambien la situación respecto de los últimos años y sí una demanda mayor de esta vacuna, porque vacunamos cinco veces a cada niño».

«No hay ningún motivo para la alarma»

IVAN CASTELO

Juan José Gestal Otero, jefe de Medicina Preventiva y Salud Pública del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago y decano de la Facultad de Medicina, es uno de los miembros de la Comisión Galega de Enfermidades Inmunoprevenibles, la que tendrá que tomar la decisión de cómo administrar la vacuna de la tosferina. Aún no hay fecha definida para la reunión, ya que «estamos cuadrando agendas».

-¿Es recomendable administrar la vacuna a las embarazadas?

-Sí, esa es la recomendación, porque la vacuna hace que la madre genere anticuerpos que transmite al bebé y que lo protege en los dos primeros meses de vida. Es aconsejable tener cubierto ese período.

-¿Puede ser más beneficioso dársela a las embarazadas que a los niños de 6 años?

-Parece que lo más favorable es vacunar a las madres y retrasar un poco la dosis de refuerzo hasta que se solucione el problema del suministro. Este retraso no va a suponer ningún riesgo para los niños.

-Se ha levantado una cierta alarma por las tres muertes en España, ¿está justificada?

-No. No hay ningún motivo para la alarma. Se está buscando la mejor solución posible para remediar el problema de suministro.

-¿Estas muertes entran dentro de lo previsible?

-Sí, pero hay que evitarlas. En Sanidad, nuestra misión siempre está en prevenirlas, reducir los riesgos al máximo.

-¿Cuál es la situación en Galicia?

-De momento no hay ningún brote. Pero tenemos que prevenir.