Jozef Wesolowski, acusado de abuso de menores, ingresó en un hospital
12 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Vaticano abrió ayer por primera vez un juicio contra un prelado, Jozef Wesolowski, acusado de cinco delitos por abusos sexuales a menores mientras ejercía sus funciones en República Dominicana. El exnuncio de 66 años no estuvo presente en el juicio puesto que tuvo que ser hospitalizado la tarde del viernes.
La audiencia de ayer solo duró siete minutos, el tiempo necesario para que el fiscal leyera los cargos que se le imputan al polaco y confirmara su hospitalización. La Santa Sede afirmó ayer que el prelado fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos, puesto que sufre problemas de salud, aunque no especificó de que tipo. El presidente del tribunal, Giuseppe Dalla Torre, indicó que el juicio se aplazará a «una fecha aún por determinar».
Tras haber sido nuncio en Bolivia y en varios países asiáticos, llegó a República Dominicana en el 2008 donde ejerció su cargo hasta agosto del 2013, mes en que fue convocado por el Vaticano tras ser acusado por medios locales dominicanos de mantener relaciones sexuales de pago con menores. En el Vaticano se le sometió más tarde a un proceso eclesiástico por el que fue condenado a colgar los hábitos y volver al estado laico. En este mismo proceso también le fue denegada su extradición a su Polonia natal.
Finalmente, la Policía detuvo al exnuncio en septiembre del 2014 siendo posteriormente condenado a arresto domiciliario por recomendación del papa. En diciembre del mismo año obtuvo una mayor libertad de movimiento en el interior del Estado vaticano por motivos de salud.
Durante la audiencia, además de las acusaciones de abusos sexuales a menores basadas en testimonios recogidos por las autoridades competentes de Santo Domingo, a Wesolowski también se le imputó haber descargado de Internet miles de fotografías de contenido pedófilo. Este último delito no se contemplaba en la legislación vaticana hasta que el papa Francisco lo introdujo en el 2013.
El juez, el abogado de la defensa y los fiscales que participarán en ese juicio sin precedentes son todos laicos italianos. En caso de ser declarado culpable, Wesolowski podría ser condenado a seis o siete años de cárcel, sin tener en cuenta posibles circunstancias agravantes.
Por otra parte, este juicio es una primicia en la historia reciente del Vaticano e ilustra la nueva línea dura frente a la pederastia. La Santa Sede anunció en junio la creación de una nueva instancia eclesiástica para castigar a los obispos culpables de negligencia, o incluso de complicidad, con los clérigos que, bajo su autoridad, cometieron algún delito. Asimismo, una comisión de expertos lleva un año asistiendo al pontífice con la finalidad de encontrar la forma de prevenir los abusos a menores que empañaron la labor de la Iglesia.
La fiscala acusa al exprelado de fingir
La fiscala del Distrito Nacional dominicano, Yeni Berenice Reynoso, dijo ayer que el exnuncio en el país, Jozef Wesolowski, acusado de cinco delitos por presunta pederastia cometidos en la nación caribeña, utilizará «el recurrido argumento de problemas de salud para evadir o torpedear el juicio».
El fiscal italiano entregó al presidente del tribunal el certificado de hospitalización del exprelado polaco y su abogado defensor subrayó la intención de su cliente de asistir al juicio.
En una rueda de prensa posterior, el viceportavoz de la Santa Sede, Ciro Benedettini, señaló que el estado de salud del acusado fue notificado el viernes y que, tras ser trasladado al centro de Urgencias del Vaticano, fue internado en un hospital público romano.
Benedettini no entró en detalles sobre la enfermedad del acusado «por privacidad» y se limitó a explicar que en el centro hospitalario recibe cuidados intensivos y que está custodiado por la policía.
Wesolowski fue sometido en septiembre a arresto domiciliario tras una decisión sin precedentes del papa con el fin de evitar «la contaminación de pruebas» y su posible fuga.