La filial de Uber suspende su actividad en el país galo, después de que la legislación francesa le haya dado la razón a los taxistas, que consideraban ilegal la actividad de esta empresa
03 jul 2015 . Actualizado a las 17:06 h.La filial de bajo coste de la plataforma de transporte Uber, la firma Uberpop, anunció este viernes a través de su director general en Francia, Thibaud Simphal, que suspenderá toda su actividad en el país galo en un contexto de fuerte enfrentamiento con el sector del taxi y el Gobierno. «Hemos decidido suspender las actividades de UberPop en Francia desde las 20.00 del viernes 3 de julio» declaró Simphal en una entrevista que publica este viernes el diario francés Le Monde.
La compañía ha tomado la decisión después de que Simphal y el responsable de Uber para Europa Occidental, Pierre-Dimitri Gore-Coty, fueran detenidos e imputados a espera de juicio por distintos delitos como práctica comercial engañosa, organización de una plataforma ilícita de transporte y tratamiento ilegal de datos personales. Esta decisión de la firma viene motivada, según el directivo, por la intención de «preservar la seguridad de los conductores de Uber» ya que han sido «víctimas de violencia en los últimos días» en Francia. Por otra parte, argumentó que la empresa desea situarse «en un espíritu de sosiego y de diálogo con los poderes públicos». No obstante, Uber confía en que el Consejo Costitucional de Francia se pronuncie en septiembre contra la nueva ley que regula el transporte con conductor en el país galo, ya que también regula la actividad de transporte con chófer.
La dos últimas semanas en Francia han estado marcadas por las intensas protestas de los taxistas contra la compañía UberPop, que permite contratar vehículos de particulares a través del movil y a la que acusan de competencia desleal, pues permite poner en contacto a viajeros con conductores sin licencia de taxi. El Gobierno francés no ha dudado en alinearse con los taxistas, ya que entiende que la compañía Uber, segun el ministro de Interior Bernard Cazeneuve, no paga ni «la mínima cotización social ni el mínimo impuesto por la actividad que realiza».
Uber, que hasta ahora solo había tenido que anular su servicio en la ciudad estadounidense de Portland, considera que la coyuntura le ha dado «publicidad a la plataforma» en Francia, donde en la actualidad cuentan con 10.000 conductores ocasionales inscritos, de los cuales unos 4.000 estuvieron «activos la última semana». Los ingresos medios de estos conductores a través de Uberpop son de 8.200 euros anuales, argumentó Simphal, que aboga por que la legislación del país galo allane los requisitos necesarios para convertirse en chofer.
«Bastaría con no exigir una formación en número de horas, sino por competencias validadas en un examen. Actualmente, el proceso para convertirse en chófer exige 250 horas de formación, mientras que para tener un título de piloto de avión ligero se exigen 20 horas. Esa formación cuesta hasta 6.000 euros», criticó el responsable de UberPop en Francia.